Desde que se sabe que Houston y Golden State se iban a medir en las Finales de Conferencia del Oeste, la conclusión que muchos sacaron fue que aquel equipo que controle al gran tirador rival tendría la mayoría de las chances de luchar por el anillo. Esto quedó reflejado este martes por la noche cuando los locales Warriors se hicieron con el primer punto de la serie.

Houston fue muchísimo mejor que su rival en los primeros quince minutos. Los vestidos de rojo movieron muy bien la pelota para encontrar tiros cómodos. Los hombres más protagonistas de este momento fueron Ariza, Capela y Howard para anotar, en mayoría de ocasiones en la zona pintada, tras pases de Harden o Prigioni. Así lograron tener una diferencia máxima de 16 puntos (49-33 en el 2º cuarto tras una bandeja de Corey Brewer).

Pero el equipo de McHale flaqueó en controlar a Stephen Curry, el gran jugador del conjunto local, y a Klay Thompson. Por eso cuando los Rockets perdieron el ritmo anotador (anotaron 9 puntos en los restantes 7 minutos de la primera mitad) vieron como esa gran ventaja se esfumó en pocos minutos. 13 puntos del base y otras 11 unidades por parte del escolta en la primera mitad empujaron a sus compañeros para soñar con una remontada y ellos penetraron constantemente una defensa que parecía diezmada. Con un doble de la gran figura de la noche contra la chicharra, Golden State partió al descanso 55-58.

A la vuelta de los vestuarios, a pesar de los esfuerzos de Terry y Harden, Houston no pudo salir de la inefectividad y el show de Curry continuó. Siete puntos del base asistidos por Draymond Green y dos del ala-pivot con asistencia del surgido en Davidson, el equipo de Steve Kerr se puso al frente 67-62 a falta de siete minutos en el tercer cuarto. Ahí fue cuando James Harden, la figura de Houston, se dio cuenta que si había alguien que podía sacar del pozo al equipo era él y desarrolló un juego más individualista. A pesar que no logró dar vuelta la historia antes de entrar al último período, ‘La Barba’ sumó 11 puntos para acercar a la visita 79-84.

Harden siguió en gran nivel en el último cuarto que hasta igualó el juego en 97 a falta de cinco minutos para el cierre. Sin embargo, no jugó como quería al final, cometió varias pérdidas de pelota, Houston erró en los pases y en el trabajo defensivo, lo que le dio nuevamente protagonismo a Curry. El MVP de la fase regular y la noche aportó los últimos nueve puntos para llegar a un total de 34 unidades, además de 6 rebotes y 5 asistencias, lo que aseguró el juego por 110-106.

El argentino Pablo Prigioni terminó la noche con 4 puntos y 4 asistencias en 14 minutos que disputó. Harden cerró con un doble-doble (28 unidades y 11 rebotes), mientras que Draymond Green también lo sumó para el local (13 puntos y 12 rebotes). La serie continuará el jueves a las 22:00, nuevamente en el Oracle Arena.