Es una costumbre poco sana la derrota de Los Angeles Lakers. En la noche del día miércoles, el equipo de Byron Scott visitó Cleveland, donde acumuló una nueva caída; esta vez fue por 120-111.
Una idea de clasificación a esta altura de la temporada regular de la NBA es una utopía. Sin embargo, una franquicia de las características de los Lakers no puede permitirse trastabillar de esta manera. Con la derrota frente a los Cavaliers, los angelinos elevan su registro a 11-44, colocándose últimos en la Conferencia Oeste. El segundo peor equipo después de los Sixers.
Una realidad muy diferente es la que atraviesa el equipo de LeBron James, que lidera la Conferencia Este con la serie 38-14. Fiel candidato al triunfo máximo en la NBA.
No hubo un momento clave en el que los Lakers mostraron una superioridad. El aspecto defensivo nuevamente llevó a dejar en evidencia el esquema errático de Scott. Russell y Clarkson sufrieron a un Irving con buenas acciones, y a un LeBron que dejó en claro ser uno de los mejores.
La noche del miércoles significó el último encuentro de Kobe Bryant en Cleveland, lo que implicó un abrazo de lo más afectuoso con LeBron, quien le pidió que salude a sus hijos, debido a su fanatismo hacia la Mamba Negra.
Kobe terminó el partido con 17 puntos, 6 rebotes y 3 asistencias. En cambio, Lou Williams fue la figura del conjunto californiano, tras encestar 28 puntos. Seguido por Clarkson con 22 tantos, 6 rebotes y 7 asistencias. Lo que no alcanzó para una victoria de visitante. En total sumaron 111 tantos, 44 rebotes y 16 asistencias.
Del lado de Cleveland, Irving superó las expectativas con la concreción de 35 unidades, seguido por LeBron James con 29 puntos, 7 rebotes y 11 asistencias. Sin embargo, los Cavs sufrieron la baja de Kevin Love, quien se retiró del campo de juego tras una lesión en su hombro izquierdo, en una jugada de ataque.
Parciales: 25-35; 22-29; 27-29 y 37-27.