Ante la ausencia de Stephen Curry, la figura de Klay Thompson se destaca cada noche que los Golden State Warriors deben afrontar un nuevo compromiso. Luego de haber limpiado a los Houston Rockets de los playoffs por un contundente 4-1, los dirigidos por Steve Kerr nuevamente fueron ampliamente superiores a unos Portland Trial Blazers que no tuvieron su mejor noche.

En un primer cuarto extremadamente disparejo, los Warriors llegaron a la increíble cifra de 37 puntos contra 17 de los Blazers. Thompson, máximo artífice del equipo encestó 18 de esos 37. Si, un solo jugador convirtió más que todo un equipo.

Ya en el segundo, la disparidad fue el punto clave del encuentro. Golden State anotó el 60% de sus tiros y Portland apenas el 23,8%. Además, 17 rebotes contra siete y10 asistencias a cuatro. De cara al descanso, los locales ganaban por 14 (65-51).

Tras el largo entretiempo, los de Terry Stotts tampoco lograron doblegar a su rival, que ya anaba por más de 20 puntos. A esta altura, Thompson ya era el goleador con 30 unidades.
Faltando poco más de tres minutos, el ala-pívot brasileño Anderson Varejao y el escolta Gerald Henderson tuvieron un nuevo encontronazo y el árbitro los expulso del partido.

El cierre solo tuvo como dato el triple-doble de Draymond Green con 23 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias y los siete triples de Thompson, que se convirtió en el primer jugador en firmar siete tiros de tres en al menos tres encuentros consecutivos.

Curry, otra vez ausente por una lesión en su rodilla que lo marginó del último cotejo ante los Rockets, no sabe cuándo volverá a las canchas. Si bien él mismo afirma sentirse bien, esta nueva lesión podría hacer que se pierda el resto de la temporada, aunque los Warriors ya se acostumbraron a jugar sin él.

El próximo partido será el martes a las 11:30 hora argentina en el Oracle Arena