Si bien la esperanza de una de las últimas cosas que se pierde, quizás era de esperarse que la selección comandada por Hernández caiga derrotado ante la histórica selección de Norte América, potenciada con estrellas de la mismísima NBA.
Estados Unidos no fue eficaz con los tiros a la distancia, pero sí lo fue por sobre Argentina que le costó remontar y achicar la distancia de 20 tantos en el marcador.
Tanto Manu Ginóbili como Carlos Delfino fueron duda hasta el último minuto, pero sin dudas esta dupla de trascendencia histórica fueron claves para que la albiceleste mantenga el equilibrio y se anime en el parqué. El Lancha volvió a jugar luego de tres años y varias operaciones, siendo su último juego en abril de 2013. Sólo participó del juego 7 minutos, y colaboró con 3 tantos, mientras que el jugador de San Antonio Spurs juegó con la camiseta de su selección tras cuatro años, sólo 14 minutos, cuando aportó 11 tantos, de los cuales, 9 fueron triples.
Fue el conjunto yanqui quien arrancó enfocado totalmente en el encuentro, ya que desde el primer momento, con un 13-3, la historia ya se tornaba para ellos. Se volvieron eficaces en ataque y defensa. La dupla Cousins-Durant fue una de los factores del éxito, sumándose George a ellos. Mientras que del lado sudamericano, el Chapu Nocioni, Acuña y Laprovittola fueron los que individualmente se destacaron.
El crecimiento de la selección nacional se estancó, mientras que Estados Unidos aumentó la ventaja tras utilizar sus variantes estrellas. Sin embargo, a los argentinos les costó el ritmo yanqui: 18 recobres en ataque contra 15. Con seis tantos y buen inicio de Manu, se retiraron al descanso 56 a 33.
Ante tal situación, Hernández decidió el ingreso de Delfino para el inicio del segundo tiempo, y con él, Argentina creció en conjunto, cuando protagonizó sus mejores minutos en el cotejo. Poco a poco el quinteto del parqué tomó la confianza necesaria para ver un el ojo del huracán. Concluyeron el tercer cuarto en igualdad de 24. Pero el último tramo de la noche fue decisivo para este amistoso, y Durant no dejó margen de error para que se lleven la victoria de manera cómoda. Hernández decidió retirar de la cancha a los más grandes, y a pesar del esfuerzo de Pato Garino, la situación ya tenía final.
Argentina volverá al país para cerrar sus compromisos previos a los Juegos de Río la siguiente semana. Primero jugará en Tecnópolis frente a Australia (martes) y Lituania (miércoles), mientras que luego irá a Córdoba para un Súper 4 ante Serbia, Francia y Croacia.
