La salida de Nelson Vivas terminó de consumarse el lunes por la tarde, y ya el martes, Quilmes tenía nuevo entrenador. Tras una reunión entre Andrés Meiszner y Blas Giunta, todo quedó bastante próximo para que el director técnico asuma funciones en el Cervecero. “Lo que más me convenció, fueron sus ganas de dirigir a Quilmes en este momento”, expresó el vicepresidente del club, en la presentación del DT, para argumentar su contratación.

Giunta desembarca en Quilmes con la necesidad de sumar entre 10 y 12 puntos para redondear una campaña aceptable desde lo numérico. El Cervecero, como varios equipos de Primera División, tiene un déficit que se encuentra en la definición. Son sólo 7 los tantos convertidos por el elenco del Sur del Gran Buenos Aires.

El DT se estrenará el próximo lunes, en la visita de su equipo a La Plata para enfrentarse a Estudiantes de aquella ciudad. “Intentaremos ser lo más simple posible, jugaremos con un 4-3-1-2 o un 4-4-2, nada complicado. Veremos cuando hagamos fútbol, tenemos buenos jugadores que a partir de hoy se transformaron en los mejores del mundo. Mis jugadores son eso, los mejores del mundo” expresó con su característico tinte el flamante entrenador, hoy en su presentación.

Entre otras cosas, Giunta también se refirió al juego del equipo en los últimos encuentros y fue contundente al afirmar que “actitud no falta, lo que falta es conocimiento. Es difícil armar un equipo cuando se renuevan tantas piezas, y este, es un equipo renovado, que se está conociendo”.

Antes de retirarse, fue consultado por un probable equipo ante Estudiantes, o al menos una idea estimativa, pero su respuesta fue clara: “Todavía no hicimos nada de fútbol, que es algo de lo que vamos a hacer hoy. Va a jugar el que esté mejor, eso es seguro”.

De esta manera, Quilmes inicia una nueva etapa tras el proceso de Nelson David Vivas, en el que más allá de las matemáticas, hay un debe en el juego y las formas de afrontar los partidos. ¿Será Giunta la solución? En el Sur, están convencidos de que sí.