La caída de esta noche ante Nueva Chicago por 2-1 en condición de local volvió a dejar expuesto a los jugadores y al ahora exentrenador de Argentinos Juniors. El pitazo del final tenía como principal condimento la inminente salida de Claudio Borghi, quien ya había amagado con la renuncia el martes pasado cuando su equipo cayó con Gimnasia de Jujuy.

"No voy a continuar al frente del equipo, hemos hablado con los dirigentes y yo seguiré mi camino. Es una decisión personal y no hay marcha atrás". Así comenzaba la conferencia del Bichi.

Enojado, atacó contra "los pelotudos que se ponen cerca del banco para insultar y nada más", haciendo referencia a algunos hinchas del conjunto de la Paternal. Así, textualmente, Y luego agregó: "A mí me han puteado mucho, pero que me puteen en mi casa no es bueno. Es por ello que prefiero irme".

Además, le agradeció a los jugadores, en especial a Juan Román Riquelme y Cristian Ledesma: "Los referentes están ahí y yo estoy orgulloso de ellos. Ahora están llorando en el vestuario. ¿Cómo puede haber hinchas que insulten a Matías Caruzzo?", cuestionó Borghi muy indignado.

Tampoco se olvidó de los dirigentes y acusó que "al Secretario General del club no lo veo hace 4 meses". Y para finalizar, señaló: "Estoy preocupado por el futuro del club. Hay muy malos manejos dirigenciales".