La propuesta habitual de Banfield, la de jugar por abajo y encontrar espacios por los costados, no se vio hoy en su máxima expresión. El conjunto de Matias Almeyda comenzó perdiendo el partido de forma muy temprana, a los 5 minutos ya perdía por 1-0. Quizas los nervios le jugaron en contra a los jugadores de Banfield y en búsqueda de conseguir el empate lo antes posible no respeto la idea de juego habitual.

El partido empezaría a cambiar cuando después de un centro, Ricardo Noir conectará de cabeza y ponía el partido en cifras de 1-1. El juego propuesto por los jugadores del Taladro no era el que le gusta a su entrtenador; muchas veces se abusó del pelotazo y las fallas en defensa, sobre todo en las pelotas paradas, no permitieron un buen funcionamiento del equipo.

Por la mitad del segundo tiempo, se dio la primera triangulación del partido en la cual participaron Zarif, Erviti y Bertolo, a quien le convirtieron el penal que luego Gaspar Servio, el arquero, lo transformaría en gol.

A partir de ahí, se vio lo mejor de Banfield, toques de primera y contención de la pelota, y hasta logrando aumentar la ventaja por medio de Jonathan Requena, que ingresó desde la banca y ayudo a mejorar la imagen de Banfield.

En conclusión, no fue el mejor partido de Banfield, pero lo importante es que dejo los tres puntos en casa y sirven para tomar confianza.