El futuro del estadio de Boca sigue siendo un tema que genera un arduo debate. Las opciones que se manejan son escasas, pero aún así dividen la opinión de los hinchas. Algunos apoyan la decisión de crear un nuevo escenario (sería a dos cuadras de la ubicación actual). En cambio, el resto sostiene que la Bombonera no se toca. La pasión y los proyectos parecen andar por caminos separados y hasta ahora no hubo un acuerdo sobre los pasos a seguir sobre la remodelación o no de una obra que es alabada en distintas partes del mundo.

Hoy, a las 18.30, se presentará en el Hotel Castelar el proyecto de la Bombonera 360, liderada por la agrupación "Juntos por Boca". Aquella propuesta estuvo en la campaña presidencial de Jorge Amor Ameal, uno de los candidatos que se presentó a elecciones en diciembre pasado. La idea consiste en cerrar el anillo comprando las dos medias manzanas que faltan y lograr que el estadio quede en forma cilíndrica, con una capacidad para 78 mil espectadores.

Con el lema #BomboneraHayUnaSola, los impulsores de este proyecto buscan darle una solución al hincha, sin mudar el escenario a otro sitio. En principio, la remodelación llevaría entre 3 y 4 años para completarla y Boca deberá mudar la localía en medio de la remodelación de su estadio.

Para Daniel Angelici, presidente de la institución, la mejor opción pasa por techar la Bombonera, dejarla como museo y usarla para eventos especiales, como recitales y partidos homenaje. Mientras que el nuevo estadio que pretende construir costará alrededor de 300 millones de doláres, con un plazo de construcción de 30 meses y se ubicaría en los terrenos recientemente adquiridos en Casa Amarilla. La capacidad con la que pretende contar la nueva infraestructura es de 80 mil espectadores, todos sentados.

Las propuestas están sobre la mesa y el socio deberá decidir en el corto o mediano plazo, cuáles son los pasos a seguir. Para algunos, el Templo no se toca. Mientras que para otros, la modernización del estadio está a la vuelta de la esquina.