Estudiantes derrotó categóricamente a Tigre por 3 a 0 en un partido complicado y en una cancha en la que siempre le costó al conjunto albirrojo (no ganaba desde hace 10 años).

El primer tiempo no arrancó bien para el Pincha. Tigre mantuvo una buena presión en la mitad de la cancha para molestar a Santiago Ascacibar e Israel Damonte y evitar las subidas de los laterales, especialmente la de Facuando Sánchez. Con este buen apriete futbolístico, los dirigidos por Pedro Troglio tuvieron las más claras en la primera parte.

De arranque nomás, una volea de Diego Morales, seguida de una llegada de Lucas Menossi y de otra de Cachete de tiro libre hacían revolcar a Mariano Andújar en los primeros minutos del encuentro.

 Pero de a poco, los de Vivas se fueron acomodando en el campo de juego. Los laterales comenzaron a pasar más, los de arriba a conectarse con el juego, y Damonte, a desprenderse en la mitad de la cancha. 

De este modo, al cabo de los primeros 45´ llegaría la ventaja en el marcador. Luego de un centro con mucha rosca de Lucas Diarte, le quedó servida a Ignacio Bailone en el segundo palo, y con mucha categoría el ex Lanús la mandó al fondo de la red. 

Ya en la segunda mitad el partido cambió. El Matador no se pudo recuperar del golpe anímico del primer gol, y Estudiantes entendió como debía pararse en la cancha.  Así fue como el tridente Solari-Rodriguez-Auzqui empezó a ser más participe del juego, y salvo los primeros 15 minutos, el equipo casi no sufrió sobresaltos para llevarse el triunfo.

Apenas comenzaba a rodar la pelota, cuando aún no se había cumplido el minuto de juego en el complemento, el Pincha estiraría su ventaja. Con mucha contundencia, en el primer ataque del segundo tiempo, Lucas Titi Rodriguez definió desparramando al arquero después de un gran pase de Bailone.

 Y esto no fue todo, ya que a los 20 minutos, en casi un calco del gol anterior, Bailone, de gran partido, mandó un centro rastrero desde el córner izquierdo para la aparición de Israel Damonte, que con un zurdazo de primera que dejó sin chances al arquero Gabbarini. Un golazo que sirvió para sellar de forma definitiva el resultado.   

De esta manera, el León sacó chapa y se llevó para La Plata un resultado valiosísimo para seguir sumando confianza de cara a lo que se viene, Por lo pronto, el próximo sábado jugará ante Unión por Copa Argentina.