River Plate recibió en el Estadio Monumental a Godoy Cruz Antonio Tomba por el partido de revancha de la fase inicial de la Copa Sudamericana. El "Millonario" ya había consiguido una ventaja de visitante, agónica, mediante Pezzella. El "Tomba" estaba obligado a marcar.

Definirlo en una mitad

River transita un momento futbolístico frutcífero y el escenario fue un césped casi perfecto, ideal para desplegar la idea que propone Marcelo Gallardo. Los de Carlos Mayor, por su parte, también se caracterizan por el buen trato de balón y mirar el arco rival, por lo que los primeros instantes no fueron para nada dispares.

El contraste de líneas fue un buen retrato en el primer tiempo. Tanto el local como el visitante tenían objetivos ofensivos pero, al mismo tiempo, sus respectivas defensas ootrgaba las garantías necesarias para el peligro de uno u otro. Jugadas riesgosas hubo para sendas partes pero fue River quien se topó con el gol. Rodrigo Mora, nuevamente, el actor principal en el Monumental para abrir el marcador cuando el reloj marcaba 24'. Pisculichi dejó pasar un balón y, tras el intento de control de Gutiérrez, el balón terminó en poder del uruguayo quien definió ante la salida de Sebastián Moyano.

El "Expreso" también hizo temblar el arco contrario buscando a Rubén Ramírez (tuvo un cabezazo y un mano a mano que tapó Barovero). River no estaba firme en el fondo. Pero Godoy Cruz tampoco... Un tiro libre dejó a la vista una jugada preparada: centrar, bajarla de cabeza y rematar. El destino se chocó con el palo, pero en el rebote, estuvo otra vez Mora, para poner el segundo, de cabeza a los 31'.

La espera y la confianza

¿Serie liquidada? Quedaban 45' y un gol de visitante siempre tiene gusto a suspenso. El Tomba debía ganar y Mayo metió los cambios necesarios para revertir la imagen (el volante José Luis Fernández por el defensor Guillermo Cosaro y Claudio Aquino por ) El "Muñeco" no se quedó atrás y puso en cancha a Tomás Martínez y Lucas Boyé, para darle frescura al ataque y descanso a Mora y Pisculichi.

Con un ojo mirando el resultado, River se mostró tranquilo, sin apuros, sintiendo que la diferencia de tres goles ya, de a poco, lo metía en la siguiente instancia. Sin embargo, no renunció a su filosofía y en varias oportunidades pudo anotar. Por derecha, Martínez primero con destellos de habilidad habilitando a Teo, quien definió desviado. Luego, Boyé, imitándolo, se mostró por aquel lado y envió un centro por bajo, que no prosperó.

La impotencia de Godoy Cruz crecía aún más. Los minutos tomaron forma y los nervios también. Protestas, manotazos, entradas fuertes... La propuesta futbolística quedó un tanto apartada. River esperó. Pero no por estar estático en la cancha, sino por demostrar tranquilidad a partir del resultado y la confianza. De esta manera, el 2-0 parecía que en algún momento aislado iba a madurar. Rojas tuvo su oportunidad a los 76' pero el Tomba respiró. Sánchez, de zurda, probó las manos de Moyano. Quedaba poco.

Casi en forma de despedida a las oportunidades desperdiciadas, Ramírez se llevó el balón con el pecho en una acción que José Luis Fernández le dio vida con un pase aéreo preciso, pero el control del delantero fue sonrisa para Barovero.

River se llevó un triunfo importante. Aseguró el pasaje en el primer tiempo y en la segunda parte manejó los tiempos. El "Tomba" nunca se respuso y las chances que tuvo no las pudo concretar, ya que si en el primer capítulo pudo haber logrado un valioso gol.
De esta manera el "Millonario" clasifica a la siguiente instancia de la Copa Sudamericana, donde enfrentará a Libertad de Paraguay, que eliminó a Barcelona de Ecuador.

Los goles: