Godoy Cruz venció a Belgrano por 1-0 por la 15° fecha del Torneo de Transición 2016 y continúa más firme que nunca en la pelea por el primer puesto. El único tanto del partido lo convirtió Pol Fernández -quien sacó un soberbio remate para estampar un verdadero golazo, de esos que no se olvidan tan fácil- pero la figura indiscutida del encuentro fue Rodrigo Rey, monarca de los palos tombinos.

Mantener la valla en cero no es un dato aislado y tampoco se trata del azar. Rey volvió a ser figura, una vez más transmitió tranquilidad al equipo y a los hinchas. En esta ocasión, no tuvo reiteradas intervenciones, pero las que tuvo fueron de mucho peligro y las solucionó con gran determinación.

Durante gran parte del primer tiempo sólo le faltaba una butaca para disfrutar de la vista privilegiada que tiene sobre el juego, sin embargo, un potente remate de César Pereyra demostró que permanece siempre alerta y con un puño desvió la redonda llevándose los primeros aplausos de la tarde.

En el complemento tuvo dos que asustaban a cualquiera. Primero desvió un gran remate de Velázquez y le reprochó la marca a sus defensores cuando rondaba la media hora.

Después, sobre el final, en lo que fue literalmente la última jugada del partido, el arquero sacó reflejos de donde no existen para sacar sobre la línea del fondo un cabezazo certero de Prediger que significaba el empate. Aplausos, ovaciones y delirio de todos. Final y triunfo. Punta e ilusión.

Dicen que todo equipo para ser campeón tiene que tener un gran arquero. Godoy Cruz ya lo tiene y se llama Rodrigo Rey, para lo demás, falta poco...

El podio destacado lo completan Pol Fernández, de gran partido e inmejorable conversión, y Fernando Zuqui, el capitán que, además de volver a tener un gran partido, hizo emocionar a todos los presentes con una posible despedida del club.