Un miércoles con mucho fútbol. Un dato que al comienzo del día fue tenido en cuenta por muchos, pero que los organizadores, quizás no lo tuvieron en cuenta. Tal vez se fue de las manos la situación. Lo cierto es que a la noche jugaban por un lado San Lorenzo - Defensa y Justicia en Avellaneda por la Copa Argentina y Huracán - Crucero del Norte en Parque Patricios. La distancia entre las canchas era de cerca de 40 cuadras.

Tanto San Lorenzo como Huracán perdieron sus partidos pero la anécdota no quedó en el césped, dentro de la cancha, dónde realmente se jugaron los cotejos. Al final del encuentro en Parque Patricios, los hinchas de Huracán que salieron del estadio y fueron hacía la Avenida Caseros a tomar el colectivo para ir a sus respectivos hogares o a seguir con sus actividades fueron sorprendidos por los micros llenos de barras bravas de San Lorenzo que se bajaron a golpearlos.

Según testimonios de hinchas y personas que estuvieron allí presentes, los barras se bajaron de los micros que iban escoltados por la policía Federal en Av. Caseros y Luna, enfrente de la comisaria 32 y a una cuadra del cuartel de bomberos. Allí empezaron a golpear a los hinchas de Huracán que esperaban los colectivos o que caminaban por esas cuadras. Se escucharon disparos de armas, golpes, corridas.

El saldo de este enfrentamiento es, hasta el momento de 7 heridos, entre los cuales se encuentra un niño de 7 años internado por un botellazo en la cabeza.

Como alguna vez dijo Diego Armando Maradona, “la pelota no se mancha” pero este tipo de situaciones hace que el fútbol, uno de los deportes más lindos y sin duda el más pasional entre los argentinos, se vea manchado porque hoy corrió peligro la vida de personas inocentes, no fue un enfrentamiento entre barras bravas, fue un enfrentamiento entre barras bravas e hinchas, personas que caminaban por la calle o volvían a sus hogares, personas inocentes.

Serán días de analizar lo sucedido, encontrar los errores y no volver a repetirlos, por el bien del fútbol, por el bien de los hinchas, por el bien de todos los argentinos.

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