Por un lado están los fundamentalistas de la estadísticas, que defienden sus datos con alma y vida. De ellos se diferencian quienes creen que sólo son números, sin ningún tipo de importancia.
Lo cierto es que sabiendo leerlas, las estadísticas brindan una información extra sobre los hechos. En Huracán-San Lorenzo son contundentes: manda el Cuervo. Es cierto, por mucho. Pero si se tienen en cuenta los últimos años, ese número se reduce considerablemente.
En la chicana barrial, los de Boedo suelen dejar de lado la etapa amateur porque fue cuando los de Parque Patricios sumaron la mayoría de sus títulos. Pero, oficialización de AFA mediante, todo debe contarse. Por eso es válido decir que la diferencia entre ambos equipos en Torneos locales no es de 32 partidos, como la mayoría de los medios reproduce.
El historial no miente: San Lorenzo tiene una ventaja de 37 partidos en torneos argentinos. 79 victorias cuervas contra 42 quemeras, con 41 empates y un partido que se les dió por perdido a ambos.
Además, los Cuervos dominan el terreno en las Copas Nacionales: 4 triunfos para ellos, con 3 para el eterno rival y 3 igualdades. Sin embargo, en amistosos domina Huracán: sobre 26 encuentros, el Globo tuvo 11 victorias contra 5 del Ciclón.
El tiempo equilibra
Los números muestran que el clásico de barrio más grande del mundo es, también, uno de los más desparejos. Sin embargo, en los últimos años, la historia cambia.
Sobre 56 enfrentamientos, hay 21 triunfos azulgranas y 19 victorias del Globo. Además, 15 empates y un partido que se les dio por perdido a ambos.
Ese encuentro que terminó con los dos equipos sin puntos ocurrió en el Apertura 1997. El quemero Ulises Fernández perdió la vida en las inmediaciones del estadio frente a una emboscada cuerva. Una vez dentro de la cancha, el partido se suspendió por los disturbios que generó la parcialidad visitante, enterada de lo sucedido con su compañero de pasión.
¿Los últimos dos? Triunfo del Globo en el Ducó, con gol de Patricio Toranzo; y victoria Cuerva en el Bidegain: Romagnoli, Caruzzo y Matos dieron vuelta el resultado, ya que el propio Toranzo había puesto en ventaja a Huracán.