La temporada comenzó muy movida para Huracán. Ya desde el mercado de pases, comenzaron los cortocircuitos entre Eduardo Domínguez y Alejandro Nadur.
En la mayoría de los casos, los reemplazos de los jugadores que habían dejado el Globo no estaban a la altura; y eso molestó al ex entrenador. Para colmo, los resultados no acompañaron y el barbudo entrenador decidió dar un paso al costado. En su lugar asumió Ricardo Caruso Lombardi, y en tres días al mando logró el primer triunfo quemero en el campeonato.
Nicolás Romat, uno de los nuevitos, aprovechó esta semana de calma para dialogar con Gol de Vestuario: "Ganamos un partido muy duro. Atlético Tucumán se hace muy fuerte de local, a mi me tocó vivirlo" explicó quien fuera el lateral decano en la última temporada. "Creo que el gol rápido ayudó mucho; no hay que olvidarse que antes de perder con Estudiantes habían estado como un año y medio sin caer de locales" añadió.
La pregunta que retumba en Parque Patricios es en cuánto influyó el cambio de entrenador. Para el jugador de 28 años, no intercedió demasiado. "Con Domínguez se notaba un planteo, estábamos trabajando muy bien. Con Ricardo (Caruso) crecimos mucho en lo anímico. Una victoria siempre bien y el empujón es mayor al conseguir los tres puntos", confesó.
Además, Romat explicó como se sintió el plantel con la salida del anterior entrenador: "La salida de Eduardo nos golpeó porque nos tomó por sorpresa, aunque no se venían dando los resultados. Pero estamos un poco acostumbrados, porque en este fútbol argentino los técnicos cambian de forma repentina".
Y ahora Nico, ¿cuál es el objetivo de Huracán? "Ponernos a tiro con la idea futbolística del nuevo técnico. Tenemos 15 días para estar lo más fino posibles con eso. Y como ganamos, el parate será más llevadero, je".