En el mundo del fútbol se dice que cuando llega un nuevo director técnico a un club los aires cambian en el día a día, pero principalmente se renuevan las ilusiones y la actitud de todos los jugadores que forman parte de un plantel profesional , eso es lo que pasó en Independiente cuando llegó Mauricio Pellegrino, todo cambió.

Ante la mirada de un nuevo entrenador, todos los fútbolistas se encuentran en consideración y tienen la suficiente confianza como para demotrar que pueden ser tenidos en cuenta. Mauricio Pellegrino logró eso, consiguió que todos quieran ser parte y aporten lo máximo desde donde les toque, armó un equipo.

El entrenador del "Rojo" llegó al club con un discurso claro: "Las cosas que se venían haciendo bien, no las vamos a cambiar" y así fue. Desde el primer momento Pellegrino le inculcó a sus jugadores que quería un equipo ordenado de mitad de cancha hacia atrás, que no de ventajas, una cuestión que se le criticaba mucho al ex entrenador Jorge Almirón. 

Partiendo de esa idea, todos los integrantes de la defensa levantaron su nivel, la dupla de centrales Cuesta-Pellerano da seguridad al equipo pero los más beneficiados son los laterales. Tanto Tagliafico como Toledo están desmostrando porqué Independiente los fue a buscar a Banfield y pagó una gran cantidad de dinero por ellos.

Además, la explosión de Martín Benítez es puro mérito del entrenador. Un chico que desde hace tiempo es parte del plantel profesional pero que nunca convenció, hoy es fundamental en el ataque de Independiente. Tiene picos altos y bajos durante un mismo partido, pero cuando está iluminado es determinante.

Pero en el fútbol de hoy en día, (para muchos) lo más importante son los resultados y Mauricio Pellegrino los viene consiguiendo. Desde que llegó a Independiente dirigió 18 partidos: Ganó 11,  empató 6, perdió 1. Tiene 26 goles a favor, 9 encontra y 10 partidos en los cuales no le convirtieron goles. 72 % de efectividad de puntos. Nada mal.

Independiente no es el mismo del semestre pasado, se volvió un equipo regular, seguro, organizado y confiado. Principalmente confiado, porque sabe que tiene la base, las herramientas y fundamentalmente la idea para seguir trabajando y lograr lo que se proponga, lo ha demostrado desde que Pellegrino está a cargo.