Independiente fue el primer club argentino que dirigió Miguel Ángel Brindisi. Comenzó con altibajos y sin encontrar un buen funcionamiento, pero con el tiempo el barco salió a flote. Con jugadores de la talla de Gustavo López, Diego Cagna, Daniel Garnero y Albeiro Usuriaga, los de Avellaneda obtuvieron en Clausura 1994 tras vencer 4-0 en la última fecha a quien llegaba como líder: Huracán.

Unas semanas más tarde, el “Rojo” comenzó una de sus aventuras coperas, la Supercopa 1994. Los de Brindisi se hicieron fuertes y siguieron de racha. Luego de dejar en el camino a Santos y Cruzeiro, el rival en la finalísima: Boca Juniors, dirigido por César Luis Menotti. Fue 1-1 en La Bombonera, y triunfo 1-0 en Avellaneda, con el recordado gol de Pascual Rambert.

Así las cosas, Independiente se ganó el derecho de jugar la Recopa Sudamericana al año siguiente. La cita fue en Tokio, Japón, y el rival, nada más y nada menos que el Vélez Sarsfield campeón de América con Carlos Bianchi como entrenador. Apenas habían pasado cuatro meses de la consagración del Fortín en la Copa Intercontinental ante el poderoso AC Milan. El “Rojo” salió a la cancha con Luis Islas; José Tiburzio Serrizuela, Claudio Arzeno, Juan Carlos Ramírez; Diego Cagna, Raúl Cascini, Jorge Burruchaga; Daniel Garnero; Sebastián Rambert y Albeiro Usuriaga. Por su parte, Vélez alineó a José Chilavert; Flavio Zandoná, Diego Trotta, Sotomayor, Raúl Cardozo; José Basualdo, Claudio Husain, Cristian Bassedas; José Herrera, Omar Asad y José Flores. Una particularidad: el hoy entrenador de Independiente, Mauricio Pellegrino, jugó aquella final para el conjunto de Liniers: reemplazó a Sotomayor.

El gol del triunfo llegaría a los 24 minutos del complemento. José Tiburcio Serrizuela obligó a Chilavert a desviar un tiro libre al córner, y tras aquella ejecución, la pelota fue devuelta al área, donde ingresaba Claudio Arzeno. “El Polaco” lanzó el famoso ‘buscapié’, y quien la empujó fue el propio Serrizuela. Tras la apertura del marcador, Vélez fue sin éxito en busca del empate. José “Turu” Flores lo tuvo en dos oportunidades, pero la Copa se fue para las vitrinas de Avellaneda. Sería el último de los tres titulos que consiguió Brindisi durante su estadía en Independiente.