Terminó el receso de verano y el fútbol se hizo presente. Con el campeonato de Primera División a un fin de semana de empezar, la apasionante B Nacional se transformó en dueña de todas las miradas en el deporte local. A los fieles seguidores de siempre que tiene la máxima categoría de ascenso, se le sumaron aquellos sedientos de la redonda que buscaban, pegados a la radio, calmar la ansiedad.

En el marco de la primer fecha, Gimnasia de Jujuy e Instituto se enfrentaron en el Estadio 23 de Agosto del Norte argentino. A falta de dos minutos para que el reloj marque las 5 de la tarde, los equipos saltaron al terreno de juego. Poco después, Nicolás Lamolina dio comienzo al encuentro.

La etapa inicial lo tenía mejor parado al elenco cordobés, con un Gastón Machín como eje del juego tratando de conectar el mediocampo. El local no hacía pie en cancha, pero buscaba la banda derecha con Martín Michel para generar peligro. Era la Gloria quien intentaba poner la pelota en el suelo y pasar en corto. La primer situación de gol para la visita la tuvo Gustavo Gotti, con un mano a mano que derivó en el tiro de esquina - uno de los tantos que tuvo - tras la atajada de Maximiliano Cavallotti.

Con el paso del tiempo el Lobo emparejó el partido, sin provocar sobresaltos en el area de Hoyos. Junto con el final del primer tiempo, la lluvia apareció y tomó protagonismo en la Tacita de Plata.

El complemento lo encontraba mejor parado a Gimnasia en el instante mismo del comienzo, pero a los seis minutos cambiaría el rumbo: Emiliano Capella vería la segunda amarilla luego de cometer un insólito penal. Dos minutos después el arquero local atajó el remate de Christian Bernardi y, en el rebote, el volante volvió a tirar sobre las manos del rival que le ahogó la posibilidad de gol.

De allí en adelante todo sería de Instituto. El dominio, las oportunidades y la falta de precisión. A los 16' Gotti metía un frentazo cruzado que no consiguió destino de red; tampoco lo logró en la segunda jugada donde, sólo, le pegó por encima del travesaño. Con el correr de los minutos el Albirrojo perdió la profundidad para romper la última línea. Los dirigidos por Mario Sciaqua pudieron dar el batacazo sobre el final, con la única carta de gol que demostró tener en la tarde de domingo: Michel; pero parecía que nada haría romper el 0-0.

Así Lamolina daría el pitazo final para concretar el empate. En conclusión Instituto fue más y tuvo todo para ganarlo, pero careció de la puntada final que cualquier equipo necesita para sumar de a tres; mientras que Gimnasia aguantó en el complemento y tampoco fue eficaz. En la próxima fecha los jujeños visitarán a Nueva Chicago. Los de Héctor Rivoira, por su parte, recibirán a Atlético Paraná.