Quilmes venía de perder un partido atípico, porque a pesar de arrancar ganando el partido frente al Rojo en Avellaneda, que luego pasó a perder y después lo empato para luego terminar perdiéndolo, el equipo de Pablo Quattrochi parecía que encontraba de a poco una indentidad de juego basada en el buen pie y aceleración de Brian Sarmiento, el más desequilibrante del equipo Cervecero. Pero hoy volvió a mostrar una pobre imagen, y Lanús, sin ser mejor, lo venció 2 a 0 aprovechando los errores del local que en defensa y mediocampo estuvo muy flojo.

 El primer tiempo arrancó con el clásico estudio entre los rivales, pero en estos primeros momentos, la visita manejaba la pelota mientras que Quilmes no le encontraba la vuelta y la defensa aguantaba los ataques del Granate que iba en busca del gol. Al pasar los minutos, el equipo visitante se afianzó más, ayudado por los errores del propio local y cada vez que iba al ataque causaba sensación de que podía lastimar, con el paso del tiempo Quilmes equiparó un poco la balanza, pero sin causar mayores complicaciones al arco de defendia Agustín Marchesin.

 Sobre el final cuando parecía que el primer tiempo se iba a acabar sin goles, un error del local en defensa terminó en penal para Lanús, que en los pies de Silvio Romero tenía la chance de ponerse en ventaja, y fue lo que pasó. Romero canjeó por gol para que Lanús se ponga en ventaja en una especie de clásico entre equipos del sur.

 Y sobre el cierre de la primer etapa, Quilmes rifó la pelota, Romero y Acosta hicieron una gran jugada, que terminó en centro y gol en contra en una jugada desafortunada de Cabral que desvió la pelota y la metió en el arco de defendía Dulcich. Quilmes se encontró yéndose al descanso perdiendo por 2 goles; la suerte nuevamente le jugaba en contra.

El segundo tiempo se podía imaginar que el local iba a salir a buscarlo intentando lograr el empate, y en los primeros minutos con desprolijidad pero con ganas iba al frente. Pero ese momento de ganas se acabó rápido, ya que la visita cada vez que salía de contra complicaba frente a una defensa desordenada y desprolija. Lanús era más en el segundo tiempo que el propio Quilmes que tenía la necesidad de hacer goles para, por lo menos, intentar descontar y soñar con empatar, pero con el paso de los minutos el nerviosismo del local le jugó en contra. Luego el DT realizó algunos cambios intentando mover las piezas, pero este cambio de jugadores no modificó mucho el trámite del partido. Quilmes sin identidad ni caracter volvió a caer frente a un rival que golpeó en los momentos justos y se hizo protagonista en la cancha del Cervecero justamente donde los de Quattrochi tienen que hacerse fuertes. Derrota 2 a 0 y muchas cosas para plantearse, ya que ahora se vuelve a estar en el fondo de la tabla, lugar de urgencias.

Ahora tendrá el difícil trabajo de enfrentar a un Boca que viene de levantada y en condición de visitante, partido más que duro tendrá por muchos motivos. Ganar no es imposible y en caso de ganar, la victoria le traerá los tres puntos y el envión anímico más importante para seguir adelante. Veremos durante la semana que cambios plantea Quattrochi para intentar ganarle al equipo de Arruabarrena. Seguramente Brian Sarmiento, si esta de buena manera física, podría volver a la titularidad en la Bombonera ¿Podrá Quattrochi ganarle a un Boca en alza? Claramente ganar sería clave para este equipo, pero de no lograrlo estaría más que complicada la situacion del actual cuerpo técnico el frente del Cervecero. Futuro incierto, pero habrá que ver que pasa, Quilmes tendrá que tener una semana tranquila para poder llegar al partido del domingo con calma, arma fundamental y que hace mucho tiempo no encuentra.