Es común que en un mercado de pases, más el de invierno, con cupos ilimitados (en el verano solo se permiten dos refuerzos) haya una danza de nombres interminable, más en River, el último campéon del fútbol argentino, sobre todo en la delantera, sector a reforzar: José Adolfo Valencia, Hugo Rodallega, Lucas Albertengo, Mauro Boselli, Gabriel Hauche y Ángelo Henriquez sonaron como posibles incorporaciones.
Sin embargo, luego del acto de renombramiento del palco de prensa del club, bautizado Jorge Topo López , (en memoria al periodista recientemente fallecido mientras cubría el Mundial, que trabajaba en River), salió a hablar Rodolfo D´onofrio, quien desmintió enfáticamente las versiones.
En diálogo con Fox Sports, el presidente primeramente se refirió al caso de Ignacio Scocco, que era pretendido pero que volvió a Newell´s, aunque desde Rosario se enojaron con Núñez por meterse en la negociación: "Al presidente de Newell's ya se le debe haber pasado el enojo porque fue allá. Todos tenemos derecho de intentarlo, igual le dije que se quedara tranquilo porque veía que iba a ir ahí".
"Teo llega hoy con autorización, mañana, o a más tardar el lunes, se presentará para realizar un acondicionamiento físico y competir al nivel que exige el fútbol argentino. Aunque si llega una buena oferta, se va a ir", acotó el mandamás del Millo sobre la situación de Teófilo Gutiérrez, que llegará esta noche a Buenos Aires para sumarse a la pretemporada, mientras se resuelve su futuro.
Sobre el mercado de pases, D´Onofrio solo dijo que muestran interés por el jugador que pidió Marcelo Gallardo; Lucas Pratto y nadie más: "Hicimos una oferta por escrito, la decisión no nos corresponde pero la intención está. Vélez tiene derecho a no venderlo y habrá que aceptarlo si es así.". La oferta es de 4,5 millones de dólares (grupo inversor de por medio), aunque la principal traba es que el Fortín no quiere reforzar a equipos locales. Y sentenció: "Si no viene, vamos a competir con lo que tenemos", en clara evidencia que se refiere a los juveniles.
"No sé si Lanzini, Balanta o quién, pero hay que vender. La temporada en Europa comienza en agosto, veremos de no desarmar el equipo igualmente", se sinceró, mostrándose preocupado por el momento financiero de la institución y que sí o sí se deben desprender o de Manu o del colombiano.
Para finalizar, el presidente blanqueó el tema de Pablo Aimar, que según muchos medios dan por hecho que volverá a ponerse la Banda, aunque todavía no hya nada confirmado, mostrando cautela: "Francescoli habló con él, está recuperándose de una operación porque quiere estar en plenitud. Si está bien, llegará. Lo vamos a esperar".