Rosario Central no supo aprovechar el envión anímico que significaron las dos victorias consecutivas, ante Patronato en el torneo local, y frente a Deportivo Morón por Copa Argentina. Ayer por la tarde el rival fue Atlético de Rafaela por la cuarta fecha del torneo de Primera División, y el resultado, un pobre 0 a 0 pero justo por lo que mostraron los equipos en cancha.

Si bien el Canalla fue quien propuso más en el inicio del partido, rápidamente entró en un barullo del que le costó salir, abusando del pelotazo desde los centrales hacia los delanteros, salteando líneas y sin una idea de juego. Apenas algunos destellos de Giovani Lo Celso (que se apagó en el segundo tiempo), el despliegue del debutante Dylan Gissi y alguna que otra jugada individual de Mauricio Martínez o Washington Camacho, lo único rescatable en la tarde rafaelina.

Es cierto que la defensa estuvo más sólida a comparación de los partidos anteriores, pero también es cierto que Rafaela no generó mucho peligro cada vez que atacaba, eligiendo casi siempre el remate desde media o larga distancia. El problema estuvo en la generación de juego, al mediocampo le costaba hacer pie y al equipo le costaba hilvanar una jugada de gol, hasta se complicaba para hacer más de tres pases seguidos sin revolear la pelota.

Para buscar situaciones claras, hay que destacar dos en el primer tiempo, primero Lo Celso con un remate que tapó Hoyos y después Teo que disparó incómodo de cara al arco. Mientras que en la segunda etapa solo una ocasión tuvo Central, cuando Giovani habilitó perfectamente a Ruben, que solo contra Hoyos (también tenía pase para el colombiano), remató cruzado afuera. Una clara muestra de que más allá del gol que le marcó a Morón, el 9 no está en su mejor momento.

Un partido horrible, palabras propias de Coudet una vez finalizado el encuentro, que vuelve a dejar sensaciones de que este equipo está a años luz de lo que supo ser en los torneos anteriores. Lo preocupante es que todavía Central no ha enfrentado a rivales de una talla importante, sin desmerecer. No queda otra que seguir trabajando, corrigiendo cosas y encontrar rápidamente un buen funcionamiento y mantenerlo. Se viene Arsenal, el próximo sábado desde las 14:00hs.

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