Si algo esperaba el público matador, era volver al triunfo. En la tarde bahiense del domingo 16 de octubre, lo logró y con paliza, ¡la segunda máxima goleada de visitante desde su vuelta a Primera!

Lo cierto es que Tigre en su conjunto jugó muy bien, pero fue Alexis Castro, que jugaba en reemplazo de Gaspar Iñiguez, quien se destacó más que ningún otro. Pucho supo liderar el equipo, con pases profundos, con el manejo de la pelota, y también con un muy lindo gol de tiro libre. ¿Será que, ante la lesión de Lucas Janson y la falta de un reemplazante natural, podrá el juvenil asumir un nuevo rol en el equipo de Pedro Troglio?

El segundo jugador a valorar es Lucas Menossi y es que si Tigre  tuvo un buen partido, claramente fue porque el mediocampo estuvo estable. Tanto para ayudar a la defensa, en su mejor partido del campeonato (Cuánto habrá tenido que ver la vuelta de Óliver Benítez), como para hacer de nexo con los volantes y delanteros. Ni más, ni menos, que lo de ellos se espera. Gran juego desplegó el número 26 y se le reconoce incluyéndolo en este podio. Además, casi mete su gol, en un buen remate desde afuera del área, apenas desviado.

Completar el podio es el trabajo más difícil, ya que hay varios jugadores que estuvieron muy parejos. Cachete MoralesSebastián Rincón, Diego Sosa, Bruno Urribarri y Óliver Benítez pasaron por mi mente para ocupar este tercer lugar. Cada uno ha hecho su mérito:

Cachete con su gol, sigue en levantada. Sigue sin ser el Cachete que nos llevó a una final, pero de seguir este camino ocupará próntamente lugar en el podio.

Diego Sosa, el que más sorprendió. Gran partido del juvenil, que imagino que de no llegar ningún jugador para reemplazar a Janson, peleará ese difícil lugar. Entrar como candidato al podio hoy, incluirlo mañana.

Bruno Urribarri peleó tanto arriba como abajo. Hizo un muy buen partido. Hace muchos muchos partidos no quedaba conforme con el trabajo de un lateral izquierdo como lo hizo ayer el Sr. Urribarri.

Óliver Benítez metió un gol de otro planeta. Nadie esperaba que agarre la pelota y la clave, y aún así, ¡lo hizo! Lo que más se rescata de él, no es el gol, sino cómo su vuelta al primer equipo logró traer estabilidad en el área más débil, la defensa.

Así y todo, el que finalmente quedó para el podio es Sebastián Rincón. La Pantera estuvo bien de mente y de físico. Generó la jugada del primer gol, con una linda bicicleta y un preciso centro. Marcó su gol (el tercero de Tigre) y tuvo varias para ampliar. Le falta estar más fino para definir, ya que metió una, pero desperdició varias claras llegadas.

Así, con hombres de la casa, Castro, Menossi y Rincón, se armó Tigre y salió del fondo.