El debut de Vélez en el campeonato no fue el esperado. El equipo mostró un rendimiento opaco, y en ningún momento pudo doblegar futbolísticamente a su rival. Sin embargo, la vuelta de Jorge Correa puede provocar alguna sonrisa en el hincha, y una especie de alivio luego del mal trago en la presentación.
Coco ingresó en el segundo tiempo, a los 16 minutos. Lo hizo por Fabricio Alvarenga, quien no tuvo un buen desempeño a lo largo del enceuntro. En los aproximadamente 30 minutos que le tocó jugar, el hombre de San Miguel le cambió la cara al equipo. No alcanzó para llevarse la victoria, pero el Fortín empezó a generar ocasiones de gol a partir de su ingreso.
La noticia es buena tanto para el elenco de Bassedas, como para el mismo Correa. Es que el juvenil había sufrido su segunda rotura de ligamentos en 2015, y que sume minutos es de vital importancia y genera muchas expectativas para su futuro reciente. Entró confiado y produjo un quiebre en la cara futbolística del conjunto de Liniers.
Habrá que ver si el entrenador velezano le sigue dando rodaje al futbolista de 22 años, y si piensa en el como un posible titular para los próximos enfrentamientos. Por lo pronto, su vuelta a las canchas ya genera un ambiente distinto en el mundo Vélez, en medio de derrotas y malas presentaciones. Es uno de los jugadores con mayor proyección de la cantera y, seguramente, le va a dar muchas alegrías al club.