El flojo accionar del equipo y la contundente caída ante Racing como local por 3-0, concluyeron en la renuncia del DT. Parecía un final anunciado desde hace tiempo, ya que Vélez no realizó una buena campaña en el primer semestre, y quedó eliminado tempranamente de la Copa Argentina ante un rival muy inferior. Para colmo, el inicio del torneo fue fatídico: la cosecha en puntos fue muy pobre, y arrojó tan solo 3 de 12. Tan sólo una victoria, y dos goles convertidos.

No sólo los números del elenco fortinero desembocaron en el portazo del ex manager del club. El rendimiento futbolístico mostrado a lo largo del 2016 fue opaco y deslucido, tuvo pocos momentos de lucidez y jamás alcanzó una buena producción. El armado del equipo se hizo muy cuesta arriba, teniendo en cuenta la cantidad de lesionados y el déficit para contratar refuerzos.

El mercado de pases también fue motivo de enojo para Christian Bassedas. Es que la dificultad de la institución para incorporar se hizo muy notoria, y equipos de menor billetera generaron más recursos y supieron negociar para llevarse futbolistas que pretendía el Fortín. Esto generó un enorme malestar en el entrenador, quien recién pudo armar el plantel completo, a muy pocos de iniciar la temporada oficial. 

Cansado de ver a su equipo sin respuesta, Bassedas le comunicó a la dirigencia, ni bien finalizado el encuentro ante la Academia, que presentaba la renuncia y no continuaría más en el club. El presidente del club, Raúl Gámez, se lo manifestó a los medios de comunicación: "Bassedas me dijo que no sigue".

Es por ello que fue postergada la conferencia de prensa que daría una vez finalizado el espectáculo. La misma será efectuada el día de mañana en la Villa Olímpica; allí, el entrenador hará oficial su renuncia ante los medios de comunicación presentes. Se terminó el ciclo Bassedas en Vélez.