Sin lugar a dudas Fabián Cubero tendrá un lugar destacado en la historia de Vélez Sarsfield. Actualmente, es el jugador con más partidos jugados en el club y será recordado como el capitán y uno de los símbolos de la segunda etapa más gloriosa de la institución. Del mismo modo, está muy cerca de tener su lugar en los libros de historia del fútbol argentino. En el encuentro ante Banfield llegó a las 592 apariciones en Primera División y, junto al Pato Fillol, están en el cuarto lugar de los jugadores con más partidos jugados. En el podio se encuentran Hugo Orlando Gatti (765 partidos), Ricardo Bochini (638) y Roberto Telch (630). Sólo el capitán velezano y el ídolo máximo de Independiente llegan a esas cifras en un solo club.

Sin embargo, este logro de Poroto Cubero no llega en su mejor momento en el club. La crisis futbolística por la que atraviesa el Fortín no lo deja fuera de las críticas y el capitán tampoco hace mucho por evitarlas. Es sabido que a Cubero siempre se le valoró el sacrificio y la personalidad, más que la habilidad. Por otra parte, se recuerda su mensaje cuando los rumores de una transferencia a Boca eran muy fuertes “un buen capitán nunca abandona el barco”. Ese uso de las redes sociales para demostrar el amor a la camiseta, hoy lo llevan a ser el blanco de varias críticas. Fotos en eventos sociales o sesiones de modelaje en el peor momento del equipo, generaron antipatías en muchos hinchas. La última ocurrió el domingo, tras la derrota con Banfield, cuando el capitán compartió una imagen de niños con la leyenda “todos al cumple”. No se le pide que suspenda su vida social y familiar tras una derrota, pero tampoco es necesario mostrarse de esa manera en redes sociales.

Fabián Cubero está haciendo historia en Vélez Sarsfield y en el fútbol argentino, pero lo más importante será que el recuerdo sea en positivo y no se vea manchado por un fracaso deportivo.

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