Girolami y Peugeot arrasan en Santa Fe

Rugió el León en Santa Fe y lo hizo bien fuerte. Los Peugeot 408 del equipo oficial sacaron a relucir su enorme potencial por las calles de la capital provincial y arrasaron con toda competencia disputada a lo largo del fin de semana. Más precisamente fue Néstor Girolami quien tuvo de festejo en festejo a los miembros de la escudería francesa. El piloto de Isla Verde se impuso por sobre sus rivales en cada oportunidad en que tomó contacto con el trazado. Comenzó siendo el más veloz en clasificación, dominó con gran autoridad la carrera nocturna y cerró su actuación con una nueva victoria en la competencia del domingo. Un fin de semana inolvidable para el Bebu, quien además saltó a la cima de la tabla de posiciones en el torneo y sueña con su primer título en la categoría.

Al igual que en la prueba del sábado, Girolami tomó la punta en la largada de la segunda Final y en ningún momento la cedió. Su bólido parecía no sufrir el desgaste por las altas temperaturas y la exigencia del dibujo, manteniendo el ritmo de carrera al tiempo que sus rivales no podían seguirle el rastro. Ni siquiera los ingresos del auto de seguridad, los cuales extinguieron en un par de ocasiones la diferencia establecida por sobre sus perseguidores, lograron poner en riesgo su triunfo. Al analizar las razones de la superioridad exhibida, el cordobés indicó: "Creo que la clave fue tener la puesta a punto correcta, porque las cosas salieron derechas desde el primer momento."

El festejo de Peugeot este domingo fue doble, dado que Agustín Canapino cerró el 1-2 de la marca finalizando como escolta de su compañero. A pesar de los problemas de frenos que lo acosaron durante todo el fin de semana, responsables de su abandono del sábado, el Titán de Arrecifes fue al frente como acostumbra, buscando rescatar varios puntos para no caerse de la lucha por el campeonato. Tras largar en la tercera posición, supo aprovechar el retraso de Matías Rossi (Toyota Corolla) para hacerse del segundo lugar y hasta procuró ir a la caza de Girolami. Sin embargo, la diferencia de potencial entre un 408 y el otro lo llevó a finalizar más preocupado por contener a Christian Ledesma (Fiat Línea), defendiendo el segundo escalón del podio.

El marplatense finalizó tercero, subiéndose al podio por primera vez en el año. Para ello fue clave la superación a Leonel Pernía (Renault Fluence), quien arribó cuarto, promediando la prueba a la altura de la horquilla, en una maniobra fina digna de un piloto de la clase de Ledesma. Tras una mala primera mitad de campeonato, este resultado lo invita a ilusionarse con cerrar el año en un buen nivel.

A pesar de que la competencia resultó lineal y escasa de emociones, hubo lugar para el susto y la preocupación tras un fuerte accidente que involucró a los autos de Emiliano Spataro y Mariano Werner. Al llegar al paso por la chicana, el Renault Fluence del piloto de Lanús se quedó sin frenos y embistió a más de 200 km/h al Fiat Línea del entrerriano, impactando ambos bólidos finalmente contra los muros de contención. Por fortuna, ninguno de ellos resultó herido y tras los trabajos de remoción de los coches y readecuación del circuito, la carrera pudo continuar.

El gran derrotado de la jornada fue Norberto Fontana. El piloto de Chevrolet debió ingresar a los boxes en dos oportunidades por problemas con un amortiguador de la suspensión delantera y así arribó a la meta 16°, sin sumar punto alguno. De este modo cedió el liderazgo del certamen por primera vez en el año y su equipo deberá recuperar el nivel del auto de las primeras fechas si aspira a pelear a la par de Girolami.

La próxima cita del Súper TC 2000 será el domingo 5 de octubre en el autódromo El Zonda Eduardo Copello de San Juan. Un clásico de la categoría, enclavado al pie de la Cordillera de Los Andes y flanqueado por montañas que no perdonan el más mínimo error.