Un nuevo fin de semana de TC se avecina y los corazones fierreros comienzan a latir más rápido. El segundo capítulo de la Copa de Oro tendrá sede en el autódromo Roberto Mouras de La Plata. Con 41 pilotos inscriptos, siendo Nicolás Pezzucchi (Dodge) el único ausente en relación a la fecha pasada por cuestiones presupuestarias, el circo de la Máxima arribará a la ciudad de las diagonales. Un show que contará en esta oportunidad con el aliciente de poder girar como acompañante en alguno de los autos históricos de la categoría, en caso de adquirir una entrada a boxes y resultar sorteado.
El trazado platense cuenta con una extensión de 4265 metros. Se caracteriza por su dibujo trabado, con pocos sectores de velocidad pura y gran cantidad de mixtos. Para destacarse en un circuito de este estilo será fundamental contar con una buena tracción para salir de las curvas lentas y un chasis con las cargas bien equilibradas. Al no abundar las posibilidades de sobrepaso, la clasificación tomará mayor preponderancia que en fechas anteriores y será la piedra fundamental para rescatar un gran resultado.
La primera vez que el TC disputó una prueba allí fue el 20 de octubre de 1996, llevándose la victoria Emilio Satriano a bordo de una cupé Chevy. Luego lo visitaría en 25 oportunidades más, siendo Ford la marca más ganadora con 14 éxitos, seguida por Chevrolet con 8. A pesar de contar con menos de dos décadas de antigüedad, el autódromo platense ha sabido coronar a más de un campeón de la categoría. Sucedió en primer lugar con el gurí Omar Martínez (Ford) en el año 2004, consagrándose luego Norberto Fontana (Dodge) en el 2006 y Mauro Giallombardo (Ford) en el 2012, ambos ganando incluso la carrera.
Tras imponerse en la primera fecha de la Copa de Oro en San Luis, Matías Rossi (Chevrolet) llega a esta nueva cita como el cómodo líder, aventajando por 47,5 unidades a Facundo Ardusso (Dodge). Consciente de que aún resta mucho camino por recorrer, el Misil indicó: “A La Plata voy con la idea de ganar, para eso trabajamos y el auto mostró nuevamente un nivel muy bueno. Las carreras hay que correrlas, todo puede pasar. Tengo buenos antecedentes, pero es al circuito que más le temo.” Sus once rivales dentro del certamen definitorio reconocen que ante el nivel superlativo mostrado por el piloto del equipo Donto Racing no poseen prácticamente margen de error, pero seguirán luchando hasta que las matemáticas los dejen sin chance alguna.
El viernes comenzará la actividad con las primeras tandas de entrenamientos y clasificación, continuando con las sesiones definitivas el sábado. Para el domingo restará el desarrollo de las series y la gran Final. El Oro espera al final del camino, pero antes, hay que pasar por La Plata.