"El Peque", actual n° 89 del ránking, se impuso ante Souza porque supo aprovechar sus chances de quiebre. Además, se lo vio suelto con el drive, pegándole con confianza a la pelota desde el fondo de la cancha. La velocidad, su pricipal arma, fue la clave para ganar el encuentro.
Durante este año, Diego gritó "campeón" en los Challengers de Aix en Provence(Francia), Praga(Rep. Checa), Campinhas(Brasil), y ahora en San Juan. El polvo de ladrillo es la superficie en la que se siente más cómodo, sin ninguna duda.
Este tipo de victorias le permitirán al argentino escalar más posiciones en el escalafón mundial. El balance del año es más que positivo hasta el momento para "El Peque", quién ya tuvo la experiencia de jugar ante Djokovic en el último US Open.
Schwartzman, después de esta victoria, está demostrando que tiene condiciones para formar parte del equipo argentino de Copa Davis. Por ahora sin Del Potro, Leo Mayer es el primer singlista.