El que fuera el equipo revelación hasta la Copa llegaba al Príncipe Felipe con el objetivo de acumular la segunda derrota consecutiva del CAI Zaragoza, que perdió entre semana ante Baskonia. Sin embargo, el equipo aragonés se recuperó de forma apabullante de un comienzo dubitativo gracias a los puntos de Bracey Wright (13), que volvía tras perderse el anterior encuentro por el nacimiento de su hijo, Rafa Hettsheimeir (15), Aguilar (12), y la inestimable ayuda en la zona del pívot Albert Fontet, protagonista de la gran defensa caísta con 3 tapones.

El partido comenzaba con el recuerdo de Carlos Pardo, entrenador de base del conjunto maño que falleció la semana pasada, al que el CAI quiso dedicar su decimotercera victoria de la temporada que deja su balance en 13-11 para volver a colarse entre los ocho primeros equipos de la competición.

Pese al resultado final, los jugadores rojillos salieron dormidos al parquet, encajando un 2-9 inicial que el CAI consiguió remontar gracias a la aportación de su mejor jugador interior, Rafa Hettsheimeir para finalizar el cuarto arriba 13-11. El segundo cuarto comenzaría con un triple de la metralleta Toppert, a lo que se sumaría la insistencia de los pívots de CAI y las penetraciones de Wright para encarrilar un parcial de 24-4 que decantaba el partido hacia el conjunto de José Luis Abós.

Ni Ivanov (2 puntos al final), ni Rautins ni Llompart colaboraban en nada para que el cuadro alicantino se levantara de su letargo. Tan solo el acierto exterior del sustituto del lesionado Ty Ellis, Ben Dewar (16 pts) y las pequeñas apariciones en la zona de Koné aportaban algo de luz a un equipo totalmente ciego, panorama que no haría sino implementar la ventaja maña al descanso hasta un elocuente 31-20.

Pese a la escasa anotación inicial, el partido encadenaría una buena serie de canastas tras la reanudación, intercambio del que saldría victorioso el CAI que a falta de dos minutos para el final del tercer cuarto conseguía su máxima ventaja hasta el momento fruto de dos grandes canastas consecutivas de Pablo Almazán (45-26). El CAI se mostraba sólido en defensa, obligando a finalizar las posesiones del Lucentum por medio de tiros forzados que les llevaría a acabar el partido con un paupérrimo 19 de 53 en tiros de campo.

El último periodo estaría protagonizado por Pablo Aguilar. El nazarí abría el cuarto tiempo con un triple y una espectacular canasta que ponía el 57-34 en el marcador. A partir de ahí llegarían los mayores momento de desquicio para Alicante, que tenían su representación en una jugada sucedida en el ecuador del periodo. Un tiro de Ivanov era taponado por Fontet, que pasaba el balón a Sam Van Rossom para lanzar el contrataque, finalizado de forma magistral por el mismo Fontet que asistía a Aguilar para que entrando desde atrás como un tráiler machacara el aro.

Los minutos finales del partido servirían para dar entrada al base canterano del CAI, Javier Marín, que dirigiría los últimos cuatro minutos del conjunto maño y para que Lucentum intentara maquillar un tanto el marcador gracias a un par de triples de Ben Dewar.

El CAI recupera así el camino de la victoria a la espera de visitar la semana que viene al Real Madrid, segundo de la Liga Endesa.