Marchaba en casa, paseaba por su tierra, por la Gran Vía de su Murcia, sudaba entre el calor al que está más habituado que el resto, con 33 grados a media tarde, pero no lo tenía tan fácil Miguel Ángel López para vencer en la Copa de Europa de marcha atlética. El campeón de Europa en Zúrich y bronce mundial en 2013 agrandó un palmarés camino de emular al de tantos otros en la especialidad de oro del atletismo español de forma más sencilla de la que le correspondía. Porque con todos esos condicionantes a favor, a López le tocó emplearse a fondo para derrotar al campeón mundial que le derrotó en Moscú 2013, el ruso Aleksandr Ivanov, y, sobre todo, al francés Yohan Diniz, el segundo más rápido de siempre en la prueba (1.17.02 el pasado mes de marzo, cuando fue récordman por una semana) y plusmarquista mundial de 50 kilómetros desde Zúrich. El primero acabó descalificado y el segundo terminó en el podio tras un duro peregrinaje. A los dos les dominó antes de eso López, que pareció condenado a la plata cuando Diniz se marchó en solitario desde el pistoletazo de salida.

"A López le tocó emplearse a fondo para derrotar al campeón mundial y al segundo más rápido de siempre"

El galo se escapó como lo hacían las rusas -después se supo que dopadas- en los grandes campeonatos para no ceder después un milímetro. Llegó a tener una ventaja de 17 segundos sobre López e Ivanov, que se emplearon a fondo en la caza, pero antes de los cinco kilómetros el guion de la prueba sufrió un nuevo giro, con los tres juntos en cabeza. Cambiaron de conductor, pero López siempre dominó el grupo hasta acabar por imponer su ritmo y descolgar a Diniz. Poco después, cayó Ivanov, advertido por su marcha irregular y finalmente descalificado.

A partir de entonces, mitad de la prueba, los movimientos solo ocurrirían por detrás. López ya cabalgó en solitario ante la victoria, marchando entre los vítores de sus paisanos. Pasó por los 10 kilómetros en 39,53, a punto de quedarse solo. A los 15, dominaba con 59.44. "Se me hizo duro, quedarme solo tan pronto, pero me vi apoyado por la afición", explicó después. No pudo con el récord de España con un último parcial más lento pero bajó de nuevo de la hora y 20 minutos, la distancia que separa a los buenos de los superiores en la marcha mundial (1.19.53). La victoria tenía premio adicional: López ya tiene asegurado que luchará por las medallas en Río 2016. En Murcia, el eslovaco Matej Toth escaló peldaños hasta la plata (1.20.21) y Diniz se colgó el bronce (1.20.37).

Del resto de españoles no llegaron tantas alegrías, lejos de la cabeza y de las marcas que abren los grandes campeonatos. Luis Alberto Amezcúa entró 23º (1.25.49) y Álvaro Martín, 34º (1.28.45), con problemas que le alejaron del sexto puesto europeo del que se mostró capaz en Zúrich. "La he liado", resumió en Twitter. José Ignacio Díaz acabó 41º (1.32.46). "Fracaso absoluto", sentenció.

Tres medallas junior

España sumó otras dos medallas en la Copa de Europa de Murcia, aunque el resto fueron en categorías inferiores. Por si López no fuera suficiente, el madrileño Diego García demostró a los 19 años que el futuro le pertenece. Dominó la categoría junior de 10 kilómetros de principio a fin (40.38m) por delante del francés Jean Blancheteu (41.11m) y del granadino Pablo Oliva, que cedió ante el galo pero agarró el bronce para España (41.19m). Las chicas no pudieron con la inagotable cantera rusa, pero alcanzaron otro bronce gracias a María Pérez y su pundonor final (47.08m). Por delante, Klavdiva Afanasyeva y Mariya Losinova. La cosecha individual arrastró a la colectiva. Los chicos subieron al escalón más alto por equipos y ellas se colgaron la plata.

Oros rusos y tres billetes a Pekin

Por la mañana, los rusos no habían dado opción en los 20 kilómetro femeninos y en los maratonianos 50 kilómetros masculinos. En medio de las sospechas por el aluvión de positivos por dopaje que han afectado a los campeones rusos de los últimos años, el subcampeón mundial Mikhail Ryzhov se impuso (3.43.32) por delante de su compatriota Ivan Noskov (3.43.57), bronce en Zúrich. Los dos lideraron la prueba con una autoridad incontestable, de principio a fin, y no resolvieron su litigio por el oro hasta los últimos cinco kilómetros. Cuando entraron en meta, quedaban casi tres minutos para que llegara el siguiente, el italiano Marco de Luca, que defendió su bronce toda la prueba (3.46.21). La medalla del transalpino es un síntoma del buen momento de su país en la prueba, en la que siempre tuvo tradición. Si De Luca llegó al podio tras muchos años en la élite, Eleonora Giorgi, más joven, confirmó su buen momento con una plata en la prueba femenina, solo superada por tan solo dos segundos al final por la campeona de Europa en Zúrich 2014, Elmira Alembekova (1,26,15), que se confirma como la nueva reina de la prueba en el continente. Otra rusa, Svetlana Vasilyeva (1.26.31) cerró el podio.

El subcampeón mundial, Ryzhov, y la campeona de Europa, Alembekova, renovaron el dominio ruso tras los escándalos de dopaje

Los españoles nunca tuvieron opciones en esas pruebas, con una suerte dispersa. El veteranísimo Jesús Ángel García Bragado fue descalificado pasado el ecuador de la prueba, al igual que el joven Marc Tur. La marcha irregular se costó también la suerte de Julia Takacs, que volvió a fallar en el peor momento y vio la roja cuando le faltaban apenas dos kilómetros y buscaba estar entre las 12 primeras, un lugar que alcanzaron, ya en el lado positivo, la jovencísima Laura García-Caro. A los 20 años, y viniendo a sustituir a la lesionada Beatriz Pascual, que se perderá la temporada, fue la mejor española. Ni ella misma se creía su décimo puesto y la marca (1.29.32) que la clasifica para el Mundial de Pekin, una competición que no tenía en mente, según explicó después. A su lado entró Raquel González (1.29.34), que también resolvió el segundo mundialista, donde el equipo de marcha se renovará. Sin mínima, de momento, Maria José Poves (18ª, 1.31.16).

En los 50 kilómetros, la buena nueva la trajo Benjamín Sánchez, también décimo y también mundialista (3.55.45) en una carrera en la que fue ganando posiciones, mientras Luis Manuel Corchete, 16ª, no consiguió completar la distancia en menos de cuatro horas (4.02.29).

Por equipos, España terminó 4º en 20 kilómetros masculinos, 5ª en femeninos y sin clasificar en 50 kilómetros por los abandonos.