La segunda victoria de la gira preparatoria de la selección española llegaba en Sevilla ante un combinado angoleño que no puso las cosas fáciles. Juan Antonio Orenga, el seleccionador español, remarcaba lo parecido que fue este encuentro al del pasado miércoles, ante Canadá.

Para el entrenador de la roja, la primera mitad sirvió para destapar el arsenal ofensivo con el que cuentan sus jugadores, y para demostrar, además, que su equipo está dispuesto a subir el nivel defensivo cuando lleguen los encuentros más difíciles. Orenga se mostraba satisfecho de que el acierto desde la línea exterior, destacando a Sergi Llull como el mejor de la mañana, vaya mejorando y asimilando el nivel del juego interior. Según el seleccionador nacional, el juego cerca del aro estuvo “muy brillante en A Coruña”, y asegura que su equipo va paso a paso, creciendo cada día.

En cuanto a las bajas del encuentro, entre las que se incluyeron a Rudy Fernández, Álex Abrines y Pau Ribas, Orenga explicó el objetivo que tiene para las rotaciones entre sus jugadores: “Tenemos que buscar la manera de que todos los jugadores jueguen alrededor de 18 minutos”, explicaba, y para ello decide jugar, en más de una ocasión, con dos bases a la vez.

El próximo partido se disputará en Granada, ante Turquía, y Orenga ha hablado sobre las sensaciones que están teniendo en esta primera toma de contacto. El seleccionador destacaba que los jugadores “creen que es posible ganar la Copa del Mundo”, y aunque admite que los rivales que les esperan son muy difíciles, buscarán jugar la final en casa.