En una jornada decisiva para casi todos los equipos del Grupo C, Finlandia y Nueva se jugaban el todo por el todo en un duelo, que, salvo sorpresa de Ucrania ante Estados Unidos, decidiría qué selección pasaría a los cruces. Al final, y con un último periodo apasionante, 

Con una única victoria, la de ayer ante Ucrania, Nueva Zelanda llegó con posibilidades a esta última jugada casi sin querer. Sus derrotas ante Turquía, más peleada, República Dominicana y Estados Unidos no le permitieron clasificarse antes y el conjunto de Nenad Vucinic se la jugó en el último momento, con sus estrellas Abercrombie y Vukona en pista.

Por otro lado, los finlandeses, con más de 8.000 paisanos en el pabellón, llegaron tocados anímicamente al último partido debido a la derrota de última hora el día anterior. Los lobos, que se enfrentaron a la Turquía de Ergin Ataman, llegaron a estar 17 puntos por encima de su rival en una tarde amarga, pero el impresionante encuentro de Omer Asik provocó la debacle finesa. Al final, esa derrota en la prórroga propició que este encuentro se convirtiera en una final para Henrik Dettmann. A su favor, dos victorias ante Ucrania y la República Dominicana.

Finlandia no pudo aguantar

El resultado al descanso fue 32-44 a favor de Nueva Zelanda

En un primer cuarto que se presumía igualado durante los primeros compases, Finlandia no pudo aguantar con el ritmo vertiginoso que le imprimió la selección neozelandesa y terminó con inferioridad en el marcador. Isaac Fotu, muy fuerte tanto en ataque como en defensa, con nueve puntos, llevó a su equipo a conseguir una buena renta, que se prolongó hasta el descanso. 

La renta siguió ampliándose gracias al genial movimiento de balón de los tall blacks, que, además de estar muy acertados en el tiro con más de un 70% de acierto. Corey Webster, base de los New Zealand Breakers, fue uno de los mejores de su equipo hasta el descanso, junto con Lindsay Tait, con una efectividad absoluta.

Ya en la segunda mitad, la ventaja objetida por el conjunto oceánico anteriormente y sin que su rival pusiera muchas trabas, el encuentro siguió su curso con un conjunto neozelandés por encima en el marcador. La selección europea puso en aprietos a su rival desde el final del tercer cuarto, cuando comenzó su remontada poniéndose a seis puntos. De hecho, Vucinic se vio obligado a detener el encuentro. En los últimos instantes se vivieron algunos momentos de angustia en pista ya que a falta de 17 segundos, el resultado era de 65-66. El cansancio físico y mental del día anterior ante el equipo otomano condenó a Finlandia en la primera parte, dejándoles apeados del Campeonato del Mundo.

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Sobre el autor
Ander Garrido
Periodismo (UPV-EHU) y árbitro de fútbol sala (FVF-BFF). Amante del fútbol vizcaíno. Contacto: [email protected].