Río 2016: todo en contra de la selección española

El deporte femenino español está de moda y no solo gracias a sus resultados, sino a la manera de lograrlos y a la actitud de la que hacen gala las deportistas nacionales. Mujeres coraje que se dejan la piel y son capaces de ganar a rivales de mayor entidad que ellas. Waterpolo, balonmano, hockey o baloncesto son algunas de las disciplinas en las que ésto se ha podido ver en los últimos años, pero en el caso del deporte inventado por Naismith, se antoja casi un milagro pensar en que España puede obtener presea.

Gran rendimiento en Europeos pero falta de medallas a nivel mundial y olímpico

La actividad de la selección española femenina de baloncesto comenzó en 1963, gracias a esas pioneras que impulsaron una disciplina hoy en día asentada en la sociedad. Con la década de los 90 comenzó a hacerse visible el gran nivel de las españolas, hegemónicas en Europa. Sin embargo, los resultados a nivel continental no han tenido continuidad en mundiales y Juegos Olímpicos. Atenas 2004 y Pekín 2008 vieron cómo el equipo liderado por Amaya Valdemoro se quedaba en cuartos de final, siendo eliminado por Brasil y Estados Unidos, respectivamente.

Selección española en Pekín 2008. Foto: zimbio

Tras la ausencia en Londres 2012, el mero hecho de estar en los Juegos Olímpicos es ya un premio para el esfuerzo titánico realizado por unas mujeres que se han quedado sin su guía cuando más la necesitaban. Y es que la fractura de un pie de Sancho Lyttle, principal argumento ofensivo de la selección y dominadora de la pintura frente a cualquier selección salvo Estados Unidos, deja huérfana a España. La pasión de veteranas como Laura Nichols, Laia Palau o Alba Torrens, será el principal argumento al que habrán de acogerse las nacionales para buscar, al menos, los cuartos de final.

Grupos y formato de competición

La lesión de Sancho no fue la única mala noticia para la selección en los últimos tiempos, ya que la disposición de los grupos del torneo se antoja realmente terrible para los intereses de España. Encuadrada en el Grupo B, la selección habrá de afrontar dos duelos en los que las esperanzas de victoria son mínimas. Estados Unidos está muy por encima del resto, y Serbia, vigente campeona de Europa, ostenta un potencial mayor que España cuando no está Lyttle.

Si se consuman esas dos esperadas derrotas, España habrá de luchar contra Canadá, selección en franca progresión y con un físico imponente. Las victorias ante Senegal y China son innegociables para España y sus opciones de estar en cuartos. Si lograra alcanzar el triunfo ante estas dos selecciones, el premio del diploma olímpico estaría casi asegurado. En el Grupo B, Australia, Brasil y Francia se erigen como máximas favoritas para la clasificación.

Por tanto, son doce las selecciones que serán de la partida en el torneo olímpico, divididas en dos grupos de seis equipos cada uno. Al finalizar la fase de liguilla, se cruzarán entre sí las cuatro primeras selecciones de cada grupo en los enfrentamientos de cuartos de final.

GRUPO A	GRUPO B
Australia	Estados Unidos
Brasil	Serbia
Francia	Canadá
Turquía	España
Japón	Senegal
Bielorrusia	China

Se espera que Astou Ndour sea quien supla a Sancho Lyttle, y pueda luchar en la pintura, si no con la clase y el acierto ofensivo de ésta, sí con coraje e intimidación defensiva. Entre las que compitieron en el Preolímpico, destacó la aportación de Leticia Romero y las ya citadas veteranas. Alba Torrens queda como máximo argumento ofensivo de las de Lucas Mondelo, que han de afrontar el torneo con ilusión y conscientes de que nada se les podrá reprochar pase lo que pase.