Estos cuartos de final están siendo los más reñidos en lo que va de Playoff. Si el primer partido se decidía de mano de Heurtel, con un triple que salvaba de la quema al Laboral Kutxa, en el segundo era Newley el que anotaba desde lejos y sumaba la primera victoria del Herbalife en esta serie.

Distintos escenarios, mismos errores

En los 2 encuentros ambos equipos han pagado caro el hecho de no rematar el trabajo que les había llevado a ponerse por delante en el marcador. En el partido del jueves, el Laboral Kutxa acabó imponiéndose gracias a un Heurtel inspirado y a la suerte en los últimos instantes, pero no fue la mejor versión del equipo ni por asomo. Los constantes errores en el ataque, con pocas ideas y nada fluido, no ayudaban a ver a un buen Baskonia.

El Herbalife Gran Canaria, que en los dos encuentros estuvo por delante, no aprovechó ese tirón para embolsarse el 2-0. En el primer encuentro, los vascos remontaron un resultado adverso y consiguieron la primera victoria. En el segundo, la defensa canaria fue más contundente, pero era el turno de los amarillos para dar la vuelta a un marcador que no le era favorable y forzaba una prórroga que lo llevaba al tercer partido.

Los datos de la serie

Como mejor defensa de la fase regular de la Liga Endesa, el Herbalife Gran Canaria dejó en 57 puntos al Laboral Kutxa en el primer encuentro y en 78 en el segundo. Contando con que su media de puntos encajados ronda los 71 puntos, podría decirse que los canarios están en sus números, incluso que los están mejorando.  Por su parte, los de Zan Tabak también están dando señas de sus mejores defensas, pero no de manera contundente. En el primer encuentro recibieron 56 puntos, mientras que en el CID el Herbalife anotó 83, 4 puntos por encima de la media que suelen encajar.

En cuanto a ataque, ambos equipos parecen no encontrarse del todo cómodos. El resultado del primer partido, en el que ninguno de los dos consiguió llegar a los 60 puntos (cuando los vascos promedian unos 82 puntos y 73 los canarios), da muestra de ello. En el segundo asalto, ambos técnicos parecían haber calmado los nervios de sus jugadores y la anotación volvió a sus cauces habituales (son números calcados a los puntos que suelen anotar de media).

Los 5 iniciales llevaron el peso del partido

En el primer encuentro, y liderados por un Lampe muy activo en la primera mitad, el 70% de los puntos vinieron de mano de los jugadores que empezaron en el cinco inicial. Sumándole a ello que Omar Cook no anotó y que Lampe se marchó con 15 puntos, la diferencia habla por sí sola. En el partido jugado en el CID, el Laboral Kutxa aprovechó mucho mejor sus rotaciones y todos los jugadores participaron de la anotación colectiva  de manera más intensa. El dato es que los integrantes del cinco inicial anotaron 37 puntos de los 78 finales, y la buena noticia es que hombres como Pleiss (acabó con 10 puntos) o los hermanos Bjelica aparecieron para ayudar al grupo.

“Casi ganamos el primer partido, y tenemos confianza para volver allí y ganar” confesaba Ryan Toolson al término del segundo encuentro.

En el equipo canario sucede algo similar, y es que los 16 puntos de Spencer Nelson y los 10 de Guerra (ambos presentes en el cinco inicial), casi la mitad del total, no fueron suficientes para imponerse a un Laboral Kutxa que no tenía el mejor de sus días. En su regreso a Gran Canaria, el equipo amarillo repartió la anotación y fueron Newley y Toolson los que tomaron el relevo a sus compañeros.

Pasados los nervios iniciales, ha llegado el día crucial. Si quieren ganar el partido y pasar a semifinales, ambos conjuntos deberán seguir la senda iniciada en el segundo encuentro, la de anotar más seguros y la de plantear una defensa que el rival tenga problemas para superar. Pero hasta que no suene el pitido final, las posibilidades quedan abiertas al 100%, con las mismas opciones para los dos equipos. Así pues, tocará esperar.