El Laboral Kutxa recibía en casa al todopoderoso Panathinaikos griego. Ambos equipos llegaban a la cita empatados con 3 victorias y 3 derrotas en la clasificación del Grupo D. Tras conseguir vencer en la siempre difícil cancha del Maccabi, los de Scariolo necesitaban la victoria para coger algo de aire para la clasificación para el Top 16.

Salida en tromba

El Laboral Kutxa arrancó el partido como una apisonadora. Los de Scariolo consiguieron un parcial de salida de 9-0, gracias a tres triples, dos de ellos anotados por Jelinek. La entrada de Diamantidis a pista, mediado el primer cuarto cambio la cara al conjunto heleno. El base griego con 5 puntos consecutivos recortaba las diferencias en el marcador (13-7). Otro nuevo parcial de 8-0 a favor del Baskonia colocaba con una gran ventaja a los locales a falta de 3 minutos para la conclusión del primer cuarto (21-7). Los helenos trataban de reaccionar por segunda vez en el partido y se ponían a 10 puntos (25-15), pero unos últimos minutos prodigiosos del Laboral Kutxa aumentaban la diferencia hasta los 15 puntos (34-19). Con este resultado se llegaba a la conclusión del primer cuarto.

Un parcial inicial de 6-0 para el conjunto vitoriano ponía en pie al Buesa Arena y obligaba al entrenador heleno a parar el partido a 7 minutos para el descanso (42-21). Tras el tiempo muerto, Panathinaikos subió la intensidad defensiva y consiguió parar la sangría de puntos del Baskonia. Un triple de Diamantidis y una canasta de Ukic recortaban la diferencia en el electrónico del Buesa Arena (50-34). Diamantidis cogía las riendas del equipo griego y dejaba el marcador en 55-44 al descanso del encuentro.

Sufrimiento hasta el final

La segunda parte no comenzó en buena liz para el conjunto baskonista. Pleiss recibía la cuarta falta personal en los primeros compases del cuarto. A esto se le sumaba el parcial de 2-14 con el que transcurría el tercer periodo. El conjunto local se encontraba totalmente atascado en ataque. Scariolo paraba el partido tras ver como el Panathinaikos se ponía por delante en el Buesa Arena (57-58). Un triple de Kelati y dos tiros de Kaukenas devolvían la ventaja a los de Scariolo (62-58). El tercer cuarto finalizaba con una corta ventaja para el Baskonia por 65-62.

El equipo de Scariolo salió enchufado en el último periodo y consiguió abrir una pequeña brecha en el marcador (76-67) mediado el último cuarto. A partir de este momento, los nervios hicieron acto de presencia en el Buesa Arena. Ambos conjuntos dejaron de anotar con facilidad y esto propició que el Panathinaikos se acercara nuevamente en el marcador (76-71). Scariolo paraba el partido con este marcador a 3 minutos para la conclusión. Al final, el Laboral Kutxa se llevo la victoria por 79-77 ante un Panathinaikos que casi culmina una remontada histórica.

Con este resultado, el Laboral Kutxa supera en la clasificación al Panathinaikos y se queda con 4 victorias y 3 derrotas, mientras que deja al Panathinaikos con 3 victorias y 4 derrotas. Jonas Maciulis con 28 de valoración (19 puntos y 8 rebotes) fue el MVP del partido. Milko Bjelica fue el más destacado en el conjunto baskonista con 17 puntos y 6 rebotes para 21 de valoración.