El inicio del derbi vasco dejaba ver a un Bilbao Basket más que motivado, encarrilando un parcial de 0-9 que dejaba helado al Buesa Arena. Hasta los jugadores interiores, como Germán Gabriel, encontraban el acierto desde lejos, algo que daba buenas sensaciones al conjunto bilbaíno. Tibor Pleiss, que parecía desdibujado en la cancha, hacía acto de presencia con una canasta que empezaba a devolver el parcial de 6-0 con el que plantar cara a los de Rafael Pueyo.

El encuentro volvía a igualarse gracias a acciones en ambas canastas, pero el buen movimiento de balón de Bilbao Basket se imponía al baloncesto del Laboral Kutxa, más pausado y dudoso. Los de negro preferían plantear un partido más físico que el que Sergio Scariolo proponía, y percutían en la pintura haciendo mucho daño a los interiores de Vitoria.

Los tiros cómodos de Bilbao Basket no cesaban, y Baskonia se mostraba impasible ante esta efectividad exterior

Aunque Bilbao erraba en sus ataques, quizás acusando el alto ritmo de juego, y veía cómo Baskonia se ponía a sólo 4 puntos, otro tiro librado de Damir Markota concluía el primer cuarto, con el resultado de 19 a 26. Los números de los visitantes desde la línea de 6’75 eran excelentes, 6 de 10 en 10 minutos, y el afán de jugar muy abiertos, incluso con los hombres más altos, estaba siendo el mejor arma de los de Pueyo.

La defensa de Bilbao Basket estaba siendo floja: las penetraciones de los jugadores exteriores se sucedían, y gracias a los errores de definición de los locales, los de negro abrían brecha en el marcador. Yendo al intercambio de puntos, Laboral Kutxa tenía poco que hacer, pero incapaz de parar los lanzamientos, no veía la manera de acercarse en el resultado.

Poeta da con la clave

Con el base italiano Pepe Poeta en pista, el Laboral Kutxa mostraba una versión radicalmente opuesta a la ofrecida hasta el momento: ayudados por los fallos de los visitantes, y apostando por la intensidad que parecía haber perdido, conseguía entrar, de nuevo, en el partido. Además, los vitorianos empezaban a mover mejor el balón, escogiendo la opción oportuna para finalizar y atacaban con más acierto.

El trabajo defensivo de Baskonia, la asignatura pendiente, volvía a aparecer en una versión muy débil, sobre todo en la defensa de los exteriores, y Raúl López, que jugaba un 1 contra 1 decisivo, ponía el +11 en el electrónico, 32-43 a falta de 2 minutos. Los nervios volvían al Laboral Kutxa, que se marcharía al descanso con el 35-48. Su falta de contundencia atrás quedaba pendiente para la segunda mitad.

Otra vez un lanzamiento de Markota abría el cuarto. En este caso, sería el preludio de un período repleto de errores en las dos canastas y de fallos en la definición que dejaban el parcial de estos 10 minutos en un corto 16-9, a juzgar por lo sucedido en los 20 minutos anteriores. La conexión Heurtel-Pleiss daría rédito al Laboral Kutxa, necesitado de los puntos de sus jugadores más importantes.

Nervios en el banquillo bilbaíno

El potencial ofensivo que el Bilbao Basket ofrecía en la primera mitad se desvanecía poco a poco, y es que el acierto conseguido en los primeros compases del encuentro desaparecía. Así, y con una defensa que no estaba destacando, se llegaba al último cuarto con un abierto 51-57.

Baskonia parecía haber aprendido la lección y mejoraba su capacidad defensiva en cuestión de segundos. A pesar del intercambio inicial de puntos, su buen trabajo por cortar balones y forzar los errores de Bilbao daba sus frutos, y conseguía encadenar 2 defensas seguidas con pérdida de balón de los de Pueyo. La remontada baskonista empezaba, entonces, con un triple de Fernando San Emeterio, y Heurtel y Poeta, que controlaban a la perfección el timing del partido, conducían a su equipo a igualar el resultado.

Con el 63 a 63 a falta de 3 minutos, el encuentro empezaba de nuevo, y serían los errores de Bilbao Basket los que les condenarían a dejar escapar un triunfo que habían acariciado con los dedos. El triple de Heurtel a falta de 1 minuto y el monumental de Nocioni a Germán Gabriel dejaban el partido visto para sentencia. De esta manera, el Laboral Kutxa se imponía 76 a 70 y se afianza en los puestos de playoff.

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Sobre el autor
Maria Cerezuela
Licenciada en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, aquí intento unir, lo mejor que puedo, mis 2 pasiones: el baloncesto y el periodismo.