La Bruixa d'Or ya tiene su primer refuerzo de cara a la próxima temporada en ACB. Se trata de Marcus Eriksson, viejo conocido del conjunto grana, entidad de la que salió hace dos campañas para enrolarse en las finales del Barcelona B. El escolta sueco, que compitió a las órdenes del ahora técnico grana Borja Comenge, promedió la pasada temporada 18 puntos, 2.5 rebotes y 0.7 asistencias en 29.52 minutos.

El exterior, de 1,96 y todavía 19 años, guarda buenos recuerdos de la entidad manresana, que fue su primer club de España y que lo fichó del KFUM Uppsala sueco, ya que con él llegó a debutar en ACB con apenas 16 años y 10 días. Mientras, el curso anterior disputó dos encuentros con el primer conjunto azulgrana. Ahora, con el Manresa tiene la oportunidad de volver a competir en la máxima categoría del baloncesto español y demostrar que puede llegar a ser un jugador de nivel.

Comenge: "Su adaptación será rápida porque ya conoce el club"

El entrenador grana afirmó que desde el club están "muy contentos" con la llegada de un jugador "que ya ha estado en Manresa" y el hecho de que "conozca el club y la ciudad hará que su adaptación sea prácticamente cosa hecha". "Pensamos que puede hacer una gran temporada con La Bruixa d’Or", reconoció Comenge, que conoce a la perfección al Eriksson, al que dirigió dos temporadas en el filial azulgrana.

 Además de sus buenos números, Eriksson cuenta con un remarcable 50% de acierto en triples, toda una pesadilla para las defensas rivales, Además, el joven sueco acaba de llegar de disputar el Europeo sub 20 en Tallin, donde se erigió como el tercer máximo anotador de la competición continental. Ahora regresa al club que le dio la primera oportunidad en ACB dispuesto a demostrar su evolución y a hacerse un hueco.