El CAI Zaragoza regresa a casa en un horario atípico, y contra un rival que sólo tira la toalla en contadas ocasiones. Con la cabeza en el playoff y su casi segura participación, los maños quieren seguir ampliando la ventaja con el Blusens Monbus, octavo en la clasificación.

La victoria ante el Unicaja dio las claves al CAI para saber para afrontar partidos difíciles, y lo sitúa séptimo, con un balance de 17-12. Además, ponía tierra de por medio con los rivales que le siguen por debajo, como Blusens, los mismos malagueños y Asefa Estudiantes. A falta de 4 jornadas, la parte baja del playoff se está poniendo muy cara, y a estas alturas, una victoria es clave, incluso para los que ahora están fuera.

Su brillante defensa y los pocos errores en la posesión de balón, un arma muy preciada para el CAI

Los maños siguen en la misma línea desde hace unas cuantas semanas: siendo la segunda mejor defensa de la liga, permiten unos 70 puntos por partido a sus rivales. En cuanto a balones perdidos, es el equipo que menos cede a sus rivales, unos 12 por encuentro, y Henk Norel, uno de sus hombres más importantes, está sexto en el ránking de los 15 mejores jugadores de la Liga. Además, el sólido bloque en el que se ha convertido el equipo ha hecho del CAI un conjunto al que cuesta mucho ganarle.

En este sentido, el capitán caísta, Pablo Aguilar, mostraba cuáles son los puntos fuertes del equipo: “Nuestro estilo de juego hace que conjuguemos momentos de juego más rápidos con momentos más calmados. El equipo tiene claro cómo y dónde hay que llevar la pelota en cada jugada, eso es la clave para no tener pérdidas y darles segundas opciones a los otros equipos”. Por otro lado, se mostraba consciente de lo fuerte que se ha hecho el bloque: “Siempre hemos demostrado a lo largo de toda la temporada que no somos un rival fácil. Somos un rival respetado dentro de la Liga, los equipos grandes nos tienen mucho respeto”.

Caminos cruzados

Para el Blancos de Rueda, el objetivo que tuvo que marcarse a principio de temporada, evitar el descenso, parece estar cumpliéndose. Con 11 victorias, se sitúa a 3 del Lagun Aro (equipo que compone, junto con la Bruixa d’Or, el playout) y su meta apunta más arriba, alejándose de la parte baja. Sus números, más modestos que los de los maños, pueden ser clave para el guión del partido: los pucelanos son la tercera peor defensa de la Liga, permitiendo algo más de 82 puntos en cada encuentro. Como el quinto conjunto que más rebotes coge, puede penalizar los errores que el CAI tenga en ataque (los de Roberto González capturan una media de 23 rebotes defensivos).

Por otra parte, el Blancos de Rueda parece débil lejos de Valladolid. De 14 partidos disputados, sólo ha conseguido ganar en 4 ocasiones, lo que se presenta como una asignatura pendiente para los pucelanos. Este dato contrasta con el contundente 11 de 14 en cuanto a victorias que acumula el CAI en el Príncipe Felipe.

El partido de ida se quedó en Pisuerga

En la primera vuelta, el Blancos de Rueda consiguió resolver los errores con los que empezó el partido y ganó al CAI después de forzar la prórroga. Cuatro meses después de este encuentro, el equipo ha sufrido importantes cambios en su plantilla, con jugadores que han salido y con otros que se han incorporado a la dinámica morada.

La jornada 30 de la Liga Endesa puede ser clave para ambos conjuntos: para los maños porque ganando se consolidaría arriba, marcando diferencias con los equipos que lo siguen, y dejando su participación en el playoff casi asegurada. Por su parte, al Blancos de Rueda le esperan equipos situados en la parte alta, excepto el Cajasol, rival de la siguiente jornada, así que la tensión se mantendrá hasta el último segundo. 

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Sobre el autor
Maria Cerezuela
Licenciada en Periodismo por la Universitat Autònoma de Barcelona, aquí intento unir, lo mejor que puedo, mis 2 pasiones: el baloncesto y el periodismo.