El encuentro que enfrentaba a CAI Zaragoza y FIATC Joventut se saldaba con victoria para los locales, pero lo que podía ser un partido plácido, a juzgar por el inicio que tuvo (30-10 para los locales en el primer cuarto), acabó con un final más que abierto. José Luis Abós, el entrenador caísta, daba las razones de por qué el partido se les complicó más de lo esperado: “Ha habido un partido con dos fases. En la primera hemos hecho un buen baloncesto con alto porcentaje de acierto y buenas acciones ofensivas y defensivas, teniendo acierto. Pero en la segunda mitad, sin dejar de poner interés, Joventut ha aumentado el nivel defensivo y con nuestros fallos ha generado una presión excesiva de ansiedad y tensión en el equipo”.

El FIATC Joventut, que jornada tras jornada está ofreciendo un mejor juego, puso las cosas difíciles a un CAI que pecó de exceso de confianza. En este caso, Abós saca una conclusión muy valiosa para los próximos encuentros: “Hemos sido capaces de ir aguantando el partido y hemos vencido la ansiedad de ese momento, que era nuestro enemigo. Para futuros partidos es importante que a pesar de esa ansiedad podamos ganar”.

En cuanto a la falta de entendimiento de la que Abós hablaba hace unas semanas, el entrenador maño volvió a remarcarla, pero ahora con una diferencia. Para él, la falta de acoplamiento entre sus jugadores, que cada vez es menos, fue suplida por el trabajo para remontar y disputar el encuentro hasta el final.

En la rueda de prensa también habló Salva Maldonado, el entrenador del FIATC Joventut, y asumió todos los errores de su equipo. “El partido lo hemos partido en la primera mitad, donde no hemos conseguido la intensidad que luego el equipo ha demostrado que tiene”, admitía Maldonado. Aun así, supo ver la mejora de su equipo, y admitía que fueron de menos a más, logrando competir el final del encuentro.  El técnico catalán sentenciaba con el “tenemos lo que nos merecemos”, dolido porque su equipo no mostró su mejor juego desde el primer minuto.