El CAI Zaragoza logró una victoria vital para sus intereses. Los alemanes plantaron cara hasta el descanso, pero no pudieron rematar el encuentro con intensidad. Los maños, que fueron de menos a más, se verán las caras con el Virtus Roma el próximo martes.
Mal inicio
Los primeros minutos fueron de tanteo, como suele ser natural en cualquier partido, para que ambos equipos se conozcan. El CAI Zaragoza tuvo ventaja en la pintura con Jones y Shermadini, pero no fue capaz de aprovechar esa superioridad. El Bonn comenzó muy fuerte el partido con un parcial abultado de 4-16. La defensa maña tenía muchas fisuras y no era capaz de parar su capacidad ofensiva. Gaffney fue el mejor jugador con 9 puntos en pocos minutos. Poco a poco, el CAI se iba metiendo en el partido y reducía la diferencia en el marcador. Aún así, al término del cuarto los alemanes les doblaban en el tanteador con un 10-20.
El segundo cuarto seguía como el anterior. El CAI no encontraba la fórmula de anotar, no tenía intensidad y perdía balones fácilmente. Un triple de Llompart redujo la ventaja y animó al equipo, pero no paraban a los alemanes en defensa. La afición apretaba y animaba, ya que el factor campo es muy importante en competición europea. Fontet, Sanikidze y Shermadini pusieron tapones, lo que evitó encajar canastas y acercarse en el tanteador. Además, los triples de Tabu y Stefansson ayudaron. Poca puntuación por parte de los dos equipos, ya que se fueron al descanso con 27-32 a favor del Bonn.
Remontada maña
El arranque del tercer cuarto fue espectacular. Los alemanes encarrilaron un parcial de 4-0, pero la reacción maña no se hizo esperar. Pronto empataron el encuentro gracias a un triple y un 2 más 1 de Roll. Se respiraba mucha tensión en el Príncipe Felipe por lo que estaba en juego, una victoria decidía mucho. Grandes minutos de Roll y Fontet, incluso Abós dejó fuera de la rotación a Jones para dejar al pívot catalán. El Bon estaba muy bloqueado debido a la intensidad en defensa de los maños. El CAI se iba al último cuarto con 4 puntos de ventaja.
El último cuarto fue brillante, con una gran remontada en el marcador. Los locales tenían que ganar por más de 4 puntos para hacerse con el average. El partido estuvo muy interesante, porque los dos conjuntos llegaron igualados al final, pero un 13-0 de parcial del CAI sentenció el encuentro. El acierto exterior con triples de Stefansson y Sanikidze levantó al público de sus asientos y provocó el éxtasis en el pabellón. Los alemanes se consumieron poco a poco y el marcador final reflejó 71-60.