La Liga Endesa da este viernes (22:15, horario peninsular) el pistoletazo de salida al año 2014 con el primer encuentro de la decimocuarta jornada, en el cual se verán las caras en el Pabellón Insular Santiago Martín, el Iberostar Tenerife y el Cajasol. Ambos equipos afrontan un partido de gran tensión con el objetivo de la Copa del Rey en el horizonte, aunque desde perspectivas completamente diferentes.

El Iberostar Tenerife (8-5) viene en plena racha tras lograr cuatro victorias consecutivas, la última ante el UCAM Murcia CB, haciendo del Pabellón Insular Santiago Martín, un fortín casi inexpugnable (con derrotas únicamente ante Joventut y Real Madrid) donde la victoria visitante se paga a precio de oro.

Gran culpa de la gran temporada del equipo tinerfeño lo tiene el pívot montenegrino Blagota Sekulic, recientemente nombrado MVP del mes de diciembre de la Liga Endesa, donde figura en lo más alto de la lista de máximos anotadores (con 18.1 puntos por partido) y como el jugador más valioso (con una media de 21.2 puntos de valoración por encuentro).

No obstante, el equipo sevillano también tendrá que tener muy vigilado al alero Saúl Blanco y al base Ricado Uriz. Ambos jugadores están mostrando de igual forma un gran nivel durante las últimas semanas, llegando a ser nombrados MVP de las jornadas 11 y 12 respectivamente, y quedando por detrás de Sekulic en la carrera por MVP del mes, completando un tridente casi inédito en la historia de la Liga Endesa.

A pesar de ello, en la isla prefieren ser precavidos y evitar verse desbordados por el entusiasmo y el optimismo ante la cercanía de la clasificación para la Copa del Rey. El choque será vital para los tinerfeños y el técnico no quiere ningún tipo de confianza ante un rival que aterriza en la isla con la intención de quemar todas sus opciones de estar presente en la competición copera. Una victoria del equipo lagunero les aseguraría una plaza en la Copa, pero un traspié podría complicar sus aspiraciones ya que los próximos dos encuentros de los isleños serán en las difíciles canchas del Valencia y del Bilbao Basket.

Por su parte, el Cajasol afronta el partido también con aspiraciones de clasificarse para la Copa, pero desde la otra cara de la moneda. Los de Aíto García son duodécimos con una marca de 6-7 tras la última derrota cosechada ante el Valencia Basket, segundos clasificados de la Liga Endesa.

Para poder estar entre los ochos equipos que tienen derecho a participar en la Copa del Rey, el Cajasol deberá ganar, al menos, tres de los próximos cuatro partidos, con los cuales se pondrá fin a la primera vuelta de la competición. Se trata de una situación muy complicada para los sevillanos que, sin embargo, puede servir de arma de doble filo.  Conocedores de lo complicado de la gesta, los jugadores saldrán a la cancha carentes de toda presión, a sabiendas de que tienen mucho que ganar y apenas nada que perder.

El conjunto sevillano viaja a Tenerife con todos sus efectivos, incluyendo al alero estadounidense Marcus Landry, última incorporación del Cajasol tras la grave lesión de Latavious Williams, el cual sufrió una fractura de peroné que le tendrá apartado de las canchas de baloncesto entre cuatro y seis meses.

En definitiva, en la noche del viernes se vivirá un trepidante partido entre dos conjuntos muy diferentes: uno, el Iberostar Tenerife, más curtido y enrachado, que destaca especialmente en el tiro exterior; el otro, el Cajasol, con un plantel joven y con mayor potencial en el aspecto reboteador.