El partido inaugural de la decimocuarta jornada de la Liga Endesa ha traído la quinta victoria consecutiva de un Iberostar Tenerife que da un paso de gigante para participar en la próxima edición de la Copa del Rey, tras imponerse con autoridad ante un Cajasol (75-59) que no fue ninguna amenaza para el cuadro tinerfeño durante ningún momento del encuentro disputado en el Pabellón Insular Santiago Martín de La Laguna.

El Cajasol fue una completa antítesis de su último partido liguero y se mostró totalmente irreconocible durante todo el encuentro, donde nunca llegó a plantar cara a su rival. El Iberostar Tenerife cogió las riendas del partido desde muy pronto, conocedor de la importancia del partido para sus aspiraciones coperas, no dando lugar para la sorpresa. Tras seis minutos de encuentro, los chicharreros ya se encontraban diez puntos arriba en el marcador (16-6) gracias al gran estado de forma mostrado por su dúo principal durante el partido, Sikma y Sekulic. 

Por su parte, los sevillanos fueron un querer y no poder, comitiendo demasiados errores, especialmente en el tiro (terminaron el partido con un 25% de acierto en tiros a canasta, con solo 12 aciertos de 47 intentos), lo cual se convertiría en la tónica general del partido del Cajasol. Únicamente pudieron luchar de tú a tú en el rebote ofensivo, principal atractivo y fortaleza del equipo dirigido por Aíto García, gracias a la gran diferencia de centímetros a su favor en la pintura, y en el tiro libre, donde finalizaron el encuentro con veinte tiros más anotados que los pupilos de Alejandro Martínez. El primer cuarto terminaría con un resultado de 22-10 favorable al cuadro insular.

Durante el segundo cuarto el encuentro siguió el mismo guión. A pesar de la ligera mejoría del cuadro sevillano (gracias, sobre todo, a Satoransky, mejor jugador sin discusión de su equipo) y el precipitado comienzo del Iberostar Tenerife, el Cajasol no conseguía dar con la tecla y el conjunto isleño terminaba por cortar de raíz cualquier intento de reacción de su rival gracias, principalmente, a un gran Sekulic, MVP del pasado mes de diciembre de la Liga Endesa. El Cajasol llegó a ponerse a seis puntos (32-26) gracias al acierto desde la línea de personal y un triple de Marcus Landry. Sin embargo, un 2+1 de Uriz tras una penetración a canasta y dos aciertos consecutivos de Sekulic reflejarían el 41-32 definitivo en el electrónico al final del segundo cuarto.

En el tercer cuarto llegaría la decable definitiva del Cajasol, el cual no vio canasta hasta pasados ocho minutos de este periodo, a raíz de una gran intensidad defensiva del conjunto canario, el cual se encontraba muy metido en el partido. Los sevillanos vieron agravados sus problemas de cara a canasta, con errores inverosímiles en bandejas, a prori, fáciles y varias jugadas finalizadas con air-ball que terminarían por hundir la moral de los jugadores. El nulo acierto del Cajasol fue aprovechado por los insulares para terminar de finiquitar el encuentro y afrontar el último cuarto con una ventaja, a la postre insalvable, de 21 puntos (60-39).

Los últimos diez minutos del encuentro fueron un mérito trámite donde Alejandro Martínez aprovechó para dar minutos a los menos habituales y dar descanso así a sus principales pilares. El Cajasol, con el orgullo más que herido, tiró de casta y corazón durante los últimos compases del encuentro para maquillar ligeramente el resultado y hacer la herida un poco menos sangrante. A pesar de ello, los de Aito García sufrieron un duro correctivo que les pone casi imposible la misión copera.

El Iberostar Tenerife volvió a encontrar en Blagota Sekulic su gran referencia. El montenegrino logró 14 puntos y 5 rebotes. Sin embargo, esta vez se unió un actor inesperado a la fiesta. Luke Sikma fue el complemento perfecto a Sekulic, y se erigió como el mejor jugador de los insulares, al lograr 10 puntos (5/6 en tiros de campo), 3 rebotes, 7 asistencias y 2 recuperaciones, para dar un total de 22 puntos de valoración.

Por otro lado, el Cajasol firmó un partido para olvidar. Su 25% en efectividad de cara a canasta lastró a todo el equipo y solo el base Tomas Satoransky dio la cara durante casi la totalidad del encuentro. El joven jugador de 22 años terminó el partido con 17 puntos (2 de 2 en triples y 9 de 10 en tiros libres), siendo el máximo anotador del encuentro. Además, repartió 3 asistencias para finalizar el encuentro con 13 de valoración.