En la mañana de este domingo, el Iberostar Tenerife se enfrentó al actual campeón de copa, el Real Madrid, equipo al que no pudo derrotar a pesar de los esfuerzos realizados. Los de Alejandro Martínez pusieron alma y corazón, pero la falta de rotación interior y la poca fortuna en el lanzamiento exterior durante el último cuarto convirtieron en imposible la oportunidad de llevarse la victoria.

Al comenzar el partido, todo hacía pensar que el pívot montenegrino: Blagota Sekulic disputaría algunos minutos, aunque fueran de refresco, para dar descanso a sus compañeros Luke Sikma y Fotis Lampropoulos, pero no fue así, el balcánico mostró claros gestos de dolor en el calentamiento, lo que parecía indicar que su recuperación no era completa. Este hecho dificultó en gran medida el encuentro para el CB Canarias, ya que solo contaba con dos pívots, descartando a Petit Niang, que a pesar de realizar el calentamiento, no fue empleado por Alejandro Martínez.

A pesar de este contratiempo, el CB Canarias comenzó muy fuerte el partido, anotando con facilidad y llevando el partido a su terreno, buscando canastas fáciles y contraataques. El pívot norteamericano, hijo del legendario Jack Sikma, estuvo soberbio en la pintura, consiguiendo 19 puntos en la primera mitad del encuentro, bien secundado por Nico Richotti, Saúl Blanco y Rodrigo San Miguel. De esta manera, llegaba el descanso y el Canarias se situaba dos puntos por encima de su rival en el electrónico.

Tras el descanso, el Real Madrid dio el arreón al que nos tiene acostumbrados, y con jugadores de la talla de Sergio Rodríguez, Rudy Fernández o Sergi Llull, puso tierra de por medio en su afán por llevarse la primera victoria en casa tras el parón copero, y poder celebrar ante su afición dicho triunfo.

El último cuarto fue puro trámite para los de Pablo Laso, que supieron gestionar su ventaja a la perfección para terminar llevándose el partido por nueve puntos de diferencia. Una de las claves de la victoria blanca fue la falta de jugadores interiores por parte de su rival. En los últimos compases del partido, se notó el cansancio de Luke Sikma. Esta percepción puede ser traspuesta a las estadísticas en datos reseñables como el hecho de que en la primera mitad anotara 19 puntos, y en la segunda tan solo tres.

Otra de las claves, fue el gran acierto desde la línea de 3, con un 47% por parte del equipo madrileño, frente a la modesta marca de 34% conseguida por el equipo aurinegro.

  • Aun así, la imagen mostrada por los pupilos de Alejandro Martínez, fue más que decente, sabiendo plantarle cara a uno de los equipos más en forma de toda Europa, tanto en la Liga Endesa como en Euroliga. Hay que quedarse con lo bueno, y saber que este es el camino a seguir para conseguir grandes logros a final de temporada.
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Sobre el autor
Luis López
Redactor de la sección del C.B Canarias