No hace tanto que el Iberostar Tenerife soñó con volar sobre alguna de las estrellas del baloncesto europeo. Este domingo se inauguró en su casa el cuarto proyecto del Canarias desde que éste reside en el Olimpo. Durante el último lustro, los de Alejandro Martínez han fabricado con artesanía la felicidad que otros estratos del deporte no le han ofrecido (al menos de forma continuada) al aficionado tinerfeño.

El Iberostar Tenerife se presentó con derrota en el Santiago Martín

Esta vez el representativo canario arrancó, como local, una temporada que aspira a marcar la diferencia en su currículo. El conjunto de La Laguna no fue capaz de atrapar su primera victoria del curso ante un respetable Morabanc Andorra, sin embargo sí ofreció un espectáculo de alto voltaje.

Deportes

White, Richotti, Abromatis, O'Leary y Sekulic fueron los encargados de defender la camiseta aurinegra desde el inicio. Fue un quinteto muy poco nostálgico, pues Martínez solo usó a dos de sus nobles escuderos: al italo-argentino Nicolás Richotti, con seis temporadas a su espalda, y al montenegrino Blagota Sekulic (esta es su tercera empresa en Tenerife). Sin embargo, la otra cara del diamante la esculpieron tres de los siete jugadores que en la 15/16 usarán la elástica del Teide por primera vez: Davin White, Tim Abromatis y Ian O'Leary.

Al otro lado del ring, un Morabanc Andorra que tuvo que viajar al extremo opuesto de la expansión geográfica de la liga para disputar su segunda jornada. Se encontraron un Santiago Martín convertido en castillo y flanqueado por los 3000 soldados de siempre, cuyas vidas no dependen del rey sino de su propia fuerza grupal.

Deportes

O'Leary abrió el parcial para crecer a partir de su diferencia. La fuerza que movía los dos metros un centímetro del ala pívot, presagiaba mucho espectáculo del suyo, sin embargo, su potencia se vio diluída como el azúcar en el café, siendo aquella su única anotación del primer periodo.

Fue un partido de poder a poder en el que venció la solidez del Morabanc

Fue una primera parte de poder a poder, en la que ambos combinados hicieron las delicias de un espectador ávido de baloncesto. Tanto Iberostar Tenerife como Morabanc Andorra emanaron solidez estratégica y fuerza física. Los de Alejandro Martínez aguantaron la batuta del concierto hasta el cuarto compás del primer periodo. Los auringeros encontraron su bestia negra en las pérdidas de posesión (nueve, frente a las siete andorranas al término de la primera mitad) toda vez habían consolidado su versión ofesiva.

Deportes

Víctor Sada mostró su mejor pefil anotador. Tal fue el espectáculo del base, que el destino lo eligió para firmar la canasta más asfixiante del momento. A falta de un minuto para el final del primer cuarto, el barcelonés le encajó su máxima diferencia al Iberostar Tenerife: 17-27. Diferencia que fue salvada por un triple de Kerry Carter sobre la bocina. El primer periodo acabó 20-27 en pro del Morabanc.

A pesar de que la reacción de los aurinegros no se hizo esperar, ésta quedó encogida por la buena indiosincracia del cuadro de Joan Peñarroya (6ª temporada en Andorra). El segundo cuarto evitó que el descalabro insular siguiera bajo la misma tendencia que el primero, sin embargo la estrategia aplicada sobre la madera, solo resultó en un pequeño recorte de distancias: 39-42.

16 rebotes (diez de Iberostar) y nueve recuperaciones (seis tinerfeñas) doblegaron al CBC

Los locales perdieron aire en la línea de tres, pues fue ahí donde los empleados de Peñarroya le endosaron 15 de los 42 puntos que campearon en el electrónico al término del segundo acto. Los parciales evidenciaron la superioridad del Andorra : 20-27 / 19-15.

De electropop a eurodance

La misma música pero con diferente letra. De electropop a eurodance. En el Santiago Martín ponían Queen por si acaso algún intangible se quedaba sin coser. El graderío le pedía a los colegiados los argumentos que no encontraban en sus jugadores. Se estaban divirtiendo, pero por pura adrenalina.

De forma muy incipiente, los de Alejandro Martínez parecieron esquinar al Morabanc al cominezo de la segunda mitad. Cuando O'Leary anotó el 41-42, un aura de castillos en el aire empezó a formarse alrededor del parqué. Aquello, sin embargo, no fue más que un espejismo en mitad del desierto. Los castillos fueron atacados y eliminados por Daniel Clark (2,10cm) desde el perímetro y por Shermadini de dos, marcando su 15º punto. Posteriormente, Betinho Gomes les echó el aceite sobrante por el tubo de escape, firmando dos triples seguidos en pro del 43-55.

Deportes

En el 28' Shawn consiguió la máxima diferencia del partido gracias a su 46-59 desde la línea de dos. Con un pasmoso 53-61, los pupilos de Martínez intentaron salvar el barco cuando Andorra ya avistaba tierra.

Rodrigo San Miguel y Nicolás Richotti buscaron la remontada

Acercaron posiciones, sin embargo los aurinegros no tuvieron la capacidad de adelantar, aunque fuera in extremis, al combinado visitante. Tanto Richotti como San Miguel quisieron ponerse al equipo sobre su espalda, y lo consiguieron, pero sin éxito.

El Iberostar Tenerife acabó acogiéndose al milagro en los últimos instantes, pues Morabanc no tuvo la capacidad de sentenciar antes el electrónico. Un triple de Rodrigo San Miguel puso el marcador a 81-81 a falta de un minuto. Las fintas de los visitantes hicieron que el tiempo corriera a su favor; a pesar de la buena presión ejercida por los presentes. Un tiro libre de Shreiner posibilitó la victoria por 81-83 de Andorra. Javier Beirán fue el jugador más valorado del partido.