Txus Vidorreta aprovechó el acto de cierre de temporada del club para hacer un balance de sus meses como entrenador del Iberostar: "Ha sido una temporada fantástica. Hemos superado retos muy complicados todos juntos: plantilla, directiva, cuerpo técnico, afición... Ha sido uno de los años más reconfortantes de mi carrera a nivel colectivo, pues pese a los problemas iniciales y las bajas del final, hemos conseguido un histórico noveno puesto. He sido el sexto entrenador con mejor porcentaje de victorias de la liga, y quiero dar las gracias al club por darme la oportunidad de vivir un año tan satisfactorio a todos los niveles".

Cuando se le preguntó por su renovación, el vasco afirmó que no podrá firmar nada hasta que acabe su labor como ayudante de Scariolo en los Juegos Olímpicos: "En la primera reunión, a mí se me ofrecieron dos años de contrato, pero yo expliqué al club que, habiendo estado en el Eurobasket, y deseando estar en los Juegos Olímpicos, solo podía firmar por esta temporada. Hay más entrenadores en esta situación, como, por ejemplo, Katsikaris, que también acaba contrato con Murcia este mes. Yo termino el 30 de junio, y el 1 de julio me incorporaré a la Selección Española, y ahí estaré libre para negociar un nuevo contrato. Yo sería inmensamente feliz si, al terminar, pudiese dirigir al Iberostar Tenerife".

"Sería feliz si, al terminar los Juegos Olímpicos, pudiese dirigir al Iberostar"

A nivel de juego, el técnico destacó la capacidad del equipo para superar las dificultades que le han surgido a lo largo del año: "Hemos tenido muchas cosas buenas, que nos han permitido reaccionar al 0-5 inicial y a otras rachas de derrotas. Creo que nos ha faltado un poco de fortuna en el momento clave. La lesión de Davin White en Manresa, cuando Sekulic y Jones arrastraron molestias físicas a la vez... Nos faltó algo de fortuna de salud en un momento clave. No obstante, son todo hipótesis, pero esos problemas físicos pudieron tener alguna incidencia".

Las derrotas en casa fueron uno de los más serios puntos débiles del equipo en el inicio del campeonato, pero, como con otros aspectos, los aurinegros acabaron dando la vuelta a la situación: "La primera vuelta fue durísima en casa, y el público siguió asistiendo casi como sufridor, pero desde la visita de Murcia hasta el final enlazamos siete victorias en nueve partidos en el Santiago Martín. Esto siempre da esperanzas de cara a los nuevos retos. Al final quedó claro que era cuestión de adquirir confianza en el nuevo sistema y perder la presión de estar últimos o penúltimos".

Vidorreta llegó a la isla en una situación aparentemente alarmante a la que logró dar la vuelta, pero, tal y como hizo en su momento, no quiso dramatizar el mal momento del equipo tras las cinco primeras jornadas: "La situación no era crítica, y lo dije en su momento. Solo se puede transmitir credibilidad cuando eres honesto y sincero, y lo primero que dije en las ruedas de prensa fue lo que transmití a los jugadores: que me gustaba la plantilla y que creía en ellos. Tuvimos buena capacidad de reacción, supimos rehacer el equipo con la llegada de Arco y de Jones, que supuso la salida de Kerry, y crecimos exponencialmente".

"Lo que primero que transmití al equipo era que confiaba en la plantilla"

Fue cuestionado también por el nivel de arbitraje, que sumió al equipo en más de una polémica, pero optó por no entrar en demasiadas valoraciones: "Creo que ha habido un nivel correcto. Nosotros hemos tenido arbitrajes que no nos han gustado, pero nos consta que nuestros rivales han tenido arbitrajes contra nosotros que tampoco les han gustado. No podemos quejarnos a nivel colectivo, pero sí hemos tenido algo de mala suerte con algunos árbitros en concreto".

En cuanto a la labor del cuerpo técnico, Vidorreta solo tuvo buenas palabras: "Nacho, Marco, Xisco y todo el equipo médico me han hecho sentir como en casa desde el principio. La salida de Alejandro fue rápida, no se fue mascando la tragedia poco a poco, y de repente se encontraron con la responsabilidad de preparar el partido de Málaga y lo hicieron a la perfección. Se han adaptado muy bien al scouting y al trabajo que yo les he pedido. He dicho desde que he llegado que somos un club moderno, y este equipo técnico es de primer nivel".

Pese a que su continuidad no está aún confirmada, habló sobre posibles movimientos y salidas en verano, y afirmó que le gustaría mantener un bloque importante de jugadores: "Yo creo que la continuidad siempre es buena. Si logras mantener a seis o siete jugadores clave, ya tienes algo avanzado, pero esta es una línea que a muy largo plazo solo pueden mantener Barcelona y Real Madrid. Yo soy partidario claramente de que continúen la mayor cantidad de jugadores posibles siempre y cuando los años acaben bien. Es importante que haya un buen núcleo para no comenzar de cero".

El noveno puesto de los chicharreros les da opciones de jugar en Europa la temporada que viene en caso de renuncia o invitación, algo que, según Vidorreta, no deberían desaprovechar: "El noveno puesto te deja a las puertas, y cuando estás a las puertas se pueden abrir. Si llega la opción, yo recomiendo al club que entre con todas las consecuencias. Las dificultades de los viajes y la adaptación de las dietas serán aspectos que habrá que afrontar, pero lo que se gana deportivamente es algo que no se puede rechazar".