En circunstancias normales este encuentro a estas alturas de temporada hubiera supuesto una auténtica final para ambos equipos de cara a conseguir la permanencia deportiva en la Liga Endesa. Sin embargo, la horrible temporada del CB Valladolid –es colista destacado, con sólo 3 victorias– hace que esté prácticamente desahuciado a nivel clasificatorio y esa percepción del partido recae casi únicamente en UCAM Murcia –antepenúltimo con ocho triunfos–.

Así lo reconocen ambos entrenadores. El de los morados, Ricard Casas, admite que no les conviene tener como referencia la salvación, dadas las pocas posibilidades que existen de conseguirla, ni siquiera el eludir el último puesto, “porque limitaría mucho, es precisa una visión más amplia”. Por su parte, Marcelo Nicola, coach de los murcianos, expresa su preocupación precisamente por esa relativa falta de presión con la que los pucelanos afrontarán el choque.

Dos equipos con dudas defensivas

No obstante, el técnico de los de Pucela prefiere referirse a otro tipo de presión. “La tenemos en cuanto a nuestra actitud, a nuestro trabajo, debemos exigirnos lo máximo posible”. Pero tratará de aprovechar esa circunstancia de la mayor necesidad de UCAM Murcia, que arribará en Pisuerga con la imperiosa necesidad de ganar para no complicarse la vida. A partir de ahí, vendrán las opciones de victoria. “Hemos competido en los cuatro últimos partidos y vamos a seguir haciéndolo, en función de eso llegarán las posibilidades de ganar”.

El entrenador manresano ve a Murcia como un equipo “netamente ofensivo, con un perímetro muy potente que tiene mucha capacidad anotadora, un Berni Rodríguez que está a un gran nivel y buenos bases”. Por el contrario, el conjunto de la Universidad Católica de Murcia sufre bastante en defensa, al igual que los pucelanos. “Tenemos que preocuparnos de nuestra capacidad de defensa y no en su despreocupación defensiva, si es que la hay”, zanjó.

(Video: CB Valladolid).

Un equipo murciano que viene con la moral subida tras haber vencido en su último duelo al Laboral Kutxa. Pese a ello, Marcelo Nicola advierte sobre el peligro de los vallisoletanos. “Es un equipo diferente al que nos enfrentamos en la ida –encuentro en el que se impuso UCAM Murcia por 101-90–, con tres americanos y dos serbios con talento y un base joven como Pepe Pozas que les aporta energía e intensidad”.

Por otra parte, el entrenador argentino no cree que el continuo vaivén de jugadores al que ha estado sometido durante la temporada el conjunto morado le afecte en su preparación para el choque. Por el contrario, opina que el CB Valladolid “ha encontrado solidez, porque es el mismo equipo desde hace tres o cuatro partidos y sólo cambia la salida de Sinanovic, que últimamente casi no contaba”.

Novedades en ambos conjuntos

Precisamente una de las principales novedades que tendrá el partido radica en el debut de Héctor Manzano, contratado por los pucelanos para sustituir al gigante hispano-bosnio. “Las negociaciones están muy avanzadas”, desveló Ricard Casas durante la previa. “Se va a saber hoy y podría incorporarse de forma inmediata para debutar mañana”, aseguró. Así se confirmó pocas horas después y el ya exjugador de Melilla vestirá la camiseta morada

Ello ayudará a paliar uno de los principales problemas de los pucelanos, su fragilidad en la pintura, aunque pese a ello este hándicap persistirá. Poseen cuatro jugadores interiores de los cuales ninguno es un cinco nato, y escasez de centímetros. No obstante, tal vez UCAM Murcia no pueda aprovechar esta circunstancia, ya que su principal bastión bajo los tableros, el francés Kim Tillie, es seria duda para el choque debido a la fascia plantar que le impidió jugar contra Baskonia. “Ya forzó contra Estudiantes y en San Sebastián tuvo que parar y dejar de jugar. Es un gran riesgo, porque podría agravarse la lesión”, considera el técnico.

(Imagen: CB Murcia).

Esta circunstancia podría haber acelerado los trámites para la reciente incorporación del pívot Víctor Arteaga, propiedad de los murcianos pero que ha jugado toda la temporada cedido en el Força Lleida. Extremo que niega Nicola. “Ya lo habíamos acordado para cuando terminara la temporada en la LEB Oro. Si hubieran jugado play-off se habría incorporado más tarde”, señala. Arteaga podría debutar en Pisuerga.

Al margen de esos alicientes y estando descafeinada la lucha por la permanencia deportiva, el interés del encuentro residirá sobre todo en conocer si el CB Valladolid continúa con esa línea ascendente de los últimos encuentros. Una hipotética victoria permitiría a su maltrecha afición al menos mantener una mínima ilusión de aquí al final de temporada. Por otra parte, UCAM Murcia buscará hacer buena la sufrida y valiosa victoria lograda ante Baskonia, consiguiendo el segundo triunfo definitivo que, en el caso de perder La Bruixa D´Or, daría a los murcianos una gran tranquilidad de cara al futuro inmediato.