En el día de todos los santos Bostjan Nachbar quiso actuar como tal, como el santo que liderase al equipo. El Baloncesto Sevilla no ha tenido en las tres jornadas anteriores un jugador que destaque por encima del resto, y el ex del Barcelona está llamado a ello esta temporada. Quizás por eso, el esloveno comenzó el partido tirando de galones, abriendo el marcador con un triple al que quiso acompañar seguidamente con otro. Campazzo y Antelo respodieron para poner el marcador 6-5, pero el de Slovenj Gradec volvió a aparecer desde la línea de tres, contagiando a Berni para que también apareciése desde la larga distancia.

El conjunto de Casimiro brilló en la línea del triple, con Bamforth sumándose a la fiesta. En menos de siete minutos, el CB Sevilla ganaba de ocho y Nachbar había anotado 12 puntos. Fue ahí cuando Katsikaris pidió tiempo muerto para cortar la racha de los sevillanos y así devolver a los suyos al encuentro. Los murcianos respondieron a las exigencias de su técnico de la mano de Antelo, Lima y Kelati, este último con un tiro de tres que volteaba el marcador 20-21. La igualdad primaba en un encuentro en el que el primer acto finalizó 23-23.

Después de Nachbar llegó Oriola

El segundo cuarto comenzó con la misma tónica que el primero, con un triple de Oriola para aventajar a los hispalenses. El catalán tomó el relevo de Nachbar para ser el candil de los suyos en ataque, con Berni ejerciendo de maestro de ceremonias y repartiendo asistencias. Más que director, el malagueño fue el ejecutor perfecto para habilitar a más de uno a encarar la canasta pimentonera. La clave del cuarto fue la actuación de Balvin, imponiéndose bajo los dos aros, permitiendo al Baloncesto Sevilla doblar en rebotes a UCAM Murcia.

Cinco puntos seguidos de Oriola, que se iba hasta los 10, ponían por arriba a los de Casimiro 46-37. Fue entonces cuando una pérdida de Anderson y otra por no sacar, unido a los puntos de Campazzo dejaban el marcador 48-41 para que los jugadores enfilasen el túnel de vestuarios. Compitió más y mejor el CB Sevilla, con una cara totalmente mejorada de los anteriores partidos y contagiado por el segundo tiempo en Gran Canaria, como habían repetido técnico y jugadores durante la semana.

Rojas acercó a UCAM a la remontada

Con siete puntos por encima en el marcador para los de San Pablo, Rojas se enchufó tras el descanso. No entraron con buen pie de nuevo en la pista los andaluces, que con una nueva pérdida de Anderson y permitiendo un 3+1 a Rojas veían como la ventaja se reducía a un solo punto. El marcador volvía a ser prácticamente parejo, como lo era el juego en la pista. El trío que brillaba en ataque supo salir al rescate para impedir a los murcianos ponerse por delante. Berni, Bamforth y Nachbar tiraron del carro, recibiendo respuesta continua de los de Katsikaris, sobre todo por parte de un inspirado Antelo y de un combativo Carlos Cabezas. 

El último de los cuartos se encaraba con aroma de partido nuevo con los mismos protagonistas de por medio, como así lo confirmaba el 63-62 con el que empezaba. En los primeros compases de los 10 minutos definitivos, Anderson volvió a cometer un error, lo que hizo que Casimiro optase por sentarlo. El base canadiense no cuajó un buen partido, sino todo lo contrario. Quizás por un mal día o quizás por no tener condiciones para dar más, el que deber ser el director de juego del Baloncesto Sevilla no está mostrándose como tal, llevando a su entrenador a jugar varios momentos del partido sin un base.

Campazzo se erigió como héroe del partido

Fue Miljenovic quien buscó por tierra de por medio con una canasta, seguido de los mejores minutos de Henton, que anotó 4 puntos. Pero en contra de los intereses del CB Sevilla, los jugadores de pimentoneros subieron el pistón. Wood anotó de dos, Oriola perdió el balón, Lima encestó, lograron más tarde un rebote y Benite anotó un triple. Consecuncia de todo ello, UCAM Murcia por encima en el marcador después de más de dos cuartos sin estarlo. Campazzo tomó definitivamente el mando del encuentro y Lima fue el jefe del rebote, dejando unos minutos finales de infarto en los que San Pablo mascaba la tragedia.

El Baloncesto Sevilla veía como el partido empezaba a escapársele, hasta que Nachbar con un nuevo triple volvía a igualarlo todo 81 puntos. Entonces el base argentino de los murcianos decidió romper el encuentro, yéndose a los 25 puntos. Con siete abajo, Nachbar logró un 3+1 imposible para regarlo un nuevo atisbo de esperanza. El esloveno intetó por todos los medios la victoria, siendo el máximo anotador del enfrentamiento con 28 puntos, pero el juego en los minutos finales no acompañó a los hispalenses, que veían con dos tiros libres de Kelati cómo volvían a sufrir una nueva derrota, la cuarta consecutiva, esta vez por 85-90.

La dirección de juego volvió a dejar dudas, cada vez más considerables, siendo Berni el máximo anotador, y el juego interior estuvo desaparecido más allá de Balvin. Casimiro tiene que seguir trabajando, y mucho, para que un bloque que volvió a competir, logre la ansiada victoria. Esta vez llegó cuando tuvo la miel en los labios, y el sabor terminó siendo, a la vez que intenso, más amargo aún.