El Fc Barcelona Lassa y el Zalgiris Kaunas se enfrentaban en un partido trampa ya que ambos equipos estaban calsificados para la siguiente fase de la competición, el TOP 16. Un Barça que venía de perder en el OAKA Arena, cancha del Panathinaikos, quería lavar su imagen delante de la afición y, así, tener la opción de pasar como primeros de grupo.

El partido no empezó como la mayoría de los culés esperaban, una defensa muy floja y un ataque mediocre y sin ideas. El equipo lituano aprovechó la poca agresividad que demostraron los catalanes en el aspecto defensivo. Jugando con posesiones muy largas y una gran circulación de balón, los de Gintaras Kaprikas,  consiguieron llegar al final del primer cuarto 11 puntos por encima del conjunto barcelonés. 

El Fc Barcelona Lassa se mantuvo en pie durante ese primer cuarto gracias a la anotación de Ante Tomic y Tomas Satoransky. La cara de Xavi Pascual era un poema y respondía claramente al dicho popular "una imagen vale más que mil palabras". El semblante del preparador catalán reflejaba preocupación y quedaba claro el mal juego que estaba realizando su equipo. El entrenador local se vio obligado a pedir dos tiempos muertos bastante seguidos al final del primer cuarto para exigir a su equipo lo que más se ha echado de menos en este partido, intensidad defensiva.

En el segundo periodo, parecía que los locales hacían intención de ponerse más serios en el aspecto defensivo, pero solo era un espejismo. Algunas jugadas sueltas y poco más pudo ofrecer el Barcelona ante un Zalgiris al que le estaba saliendo una noche redonda. Con la entrada al campo de Juan Carlos Navarro, la afición culé esperaba poder darle la situación al equipo, pero el capitán no tuvo su mejor noche y no volvió a jugar más en todo el encuentro. 

Exhibición boricua

En la parte final del primer tiempo, los catalanes superaron en anotación a los visitantes pero no consiguieron remontar. La mejora del Fc Barcelona Lassa en ataque tenía nombre: Carlos Arroyo. Empezó a manejar al equipo y a deleitar al Palau Blaugrana con su gran manejo de balón y tres triples que pusieron a la afición culé en pie. Cuando se acercaba la conclusión del periodo, se produjo un gran intercambio de triples entre los dos equipos que hizo que el gran partido que estaba realizando el puertorriqueño, se eclipsara con la floja defensa de su equipo.

A pesar de haber recortado la diferencia de puntos con respecto al inicio del partido, las sensaciones no eran del todo buenas y se iban al descanso sabiendo que no se había hecho una gran actuación y que tenían serios problemas defensivos.

Intento de remontada

El partido se reanudaba y tras un gran porcentaje de anotación de ambos conjuntos, los locales empezaban a defender de la manera que se les estaba exigiendo. De la mano de Pau Ribas y Perperoglou, el Fc Barcelona Lassa se ponía a solo un punto. A pesar del gran partido del croata Ante Tomic, no conseguían los catalanes ponerse por delante y darle la vuelta al marcador.

Al final del tercer cuarto, se volvían a suceder los problemas con el cronómetro electrónico del Palau y los árbitros se veían obligados a parar el tiempo durante varios minutos. No fue el primer fallo de este tipo durante el partido, ya que el juego se detuvo dos o tres veces debido a esto. El funcionamiento eléctrico de las instalaciones culés eran una clara metáfora del partido que estaba realizando su equipo.

Tras haberse puesto a una sola canasta de remontar al conjunto lituano, el Barça volvió a ofrecer su peor cara en defensa y encajó un parcial de anotación negativo que hizo que la diferencia de siete puntos con la que se habían ido al descanso quedara intacta.

En el último cuarto, los de Xavi Pascual debían de hacer un esfuerzo extra en defensa para poder llevarse el partido. Ante Tomic tiró del carro azulgrana y consiguió acercar a los catalanes a cuatro puntos de diferencia, pero el Zalgiris Kaunas aguantó bien el arreón final del Barça y consiguió su primera victoria (88-92) a domicilio contra un equipo importante en esta fase de grupos.

Obligados a ganar

Tras esta derrota, la segunda consecutiva en Euroliga, el Fc Barcelona Lassa debe ganar en el feudo del Lokomotiv Kuban Krasnodar para asegurarse la primera plaza del grupo C. Por otra parte, los culés preparan ya el importante partido de este fin de semana en la competición doméstica que les enfrenta al Unicaja de Málaga y que será una batalla por mantenerse en los puestos altos de la tabla.