Jaume Ponsarnau compareció en rueda de prensa después para valorar una nueva derrota de su equipo, esta vez en el comienzo de la segunda vuelta, ante el Movistar Estudiantes por 76-82 en un partido que fueron durante los cuarenta minutos por detrás en el marcador: "Hemos empezado el partido con poco tono. Teníamos claras las cosas que teníamos que hacer pero teníamos que hacerlas más intensas, con más determinación, con más dureza. Nuestra defensa era cómoda. Teníamos mucho miedo de todas las situaciones que nos rompieron ellos en el partido de ida, hemos estado muy precavidos y nos hemos equivocado. Han tenido muchísimo acierto en la primera parte, nos hemos descompuesto y el partido se ha puesto cuesta arriba".

El entrenador del Gipuzkoa Basket, a pesar de reconocer la suprioridad del rival, destacó varios aspectos positivos del equipo para no pintar de color negro todo lo que ocurrió en el encuentro: "Hemos salido del vestuario bien. Teníamos por fin las ideas claras, el tono asumido y con el riesgo de cómo teníamos que jugar y competir. Se ha notado. Les podíamos hacer más daño en el tercer cuarto pero ha habido mucha canasta mental suya. Ha habido muchas situaciones que a nivel mental nos podía haber arrollado y no ha sido así. El equipo ha demostrado tener coraje y voluntad pero nos hemos demostrado a nosotros mismos que en esta Liga no podemos empezar así los partidos".

El catalán también es consciente que en los últimos encuentros, ante CAI Zaragoza y Movistar Estudiantes, el cuadro donostiarra no ha estado en buena línea defensiva, esencial primordial para ganar los encuentros: "Necesitamos encontrar más sensaciones de más jugadores pero eso va poco a poco. Si recuperamos nuestra buena línea de trabajo lo vamos a hacer. Nosotros estábamos especulantes al espacio y poco físicos. Ha faltado una línea defensiva en los primeros veinte minutos. A veces me he preocupado de alargar el equipo para que hubiese energías y me ha costado acertar en la gestión. Ha habido cosas que no hemos sabido jugar como tenemos que jugarlas y ha sido mérito del Estudiantes".

Ponsarnau, por último, estuvo crítico con la actuación de su equipo en el segundo cuarto, donde fue clave el acierto estudiantil y las malas decisiones locales para sacar una renta suficiente en el marcador: "Hemos querido forzar situaciones que no hacía falta forzárlas, teníamos que jugarlas más fácil. En el segundo cuarto ha habido una acumulación y ha sido clave también para el ritmo del partido. En la segunda parte sólo nos podemos achacar defender los seis últimos segundos del ataque del rival. Nuestra defensa se basa en estar pendiente de todo y cuando no ha aparecido la serenidad defensiva lo hemos hecho mal".