El RETAbet Gipuzkoa Basket se enfrenta a una prueba de fuego este fin de semana. Tras cuatro derrotas, todas ellas claras y por más de diez puntos, los guipuzcoanos afrontan el primer encuentro que podría estar enmarcado dentro de su "Liga". Sin embargo, en dicho encuentro espera una de las pistas más fuertes de la Liga Endesa: Fontes Do Sar. Allí juega el Río Natura Monbus, rival de esta jornada, un equipo que en su propia cancha se hace muy fuerte gracias al gran ambiente que se genera entre el equipo y la afición. Una prueba de fuego.

El conjunto donostiarra ha comenzado la temporada en plena pretemporada. Cuatro derrotas ante Herbalife Gran Canaria, Real Madrid, Dominion Bilbao Basket y Barcelona Lassa han encendido todas las alarmas en la cúpula de los de San Sebastián. Menos en el derbi, en los tres encuentros restantes las derrotas han sido por más de 30 puntos. Algo debe cambiar desde este mismo partido antes de que sea demasiado tarde. "Nos hemos visto muy incapaces de competir dentro de los partidos", señaló Ponsarnau. De hecho, todavía no se ha visto la competitividad necesaria para estar en la Liga Endesa.

Un mes importante de cara al futuro

Los guipuzcoanos afrontan un mes de noviembre que será clave para el futuro en la competición, sobre todo teniendo en cuenta los encuentros de casa. En teoría, el calendario es más asequible, aunque hay que cambiar lo demostrado hasta ahora para que comiencen a llegar las victorias. El equipo, como dijo su propio técnico, tendrá un cambio al verse con capacidad de competir de tú a tú ante un rival y sobre todo fuera de casa, donde las dificultades se multiplican. Por ello, el hecho de jugar en la pista gallega puede ser una buena oportunidad para el RETAbet Gipuzkoa Basket.

El Río Natura Monbus, por su parte, llega tras una dura derrota ante el Valencia Basket (76-56) y con un balance de dos victorias y dos derrotas que les coloca, por ahora, dentro de la pelea por la Copa del Rey en el octavo puesto. Los gallegos, en cambio, han vencido con contundencia en los dos encuentros disputados en su propia casa. Primero ante el Baloncesto Sevilla (88-53) y después ante el CAI Zaragoza (82-67). En total, una media de 85 puntos por partido anotados y sólo 60 puntos encajados, algo que les da un +25 en sus duelos como local. 

Sin embargo, los de Moncho Fernández no actúan igual fuera de casa, donde han caído ante dos de los equipos más fuertes de la Liga: Laboral Kutxa (82-75) y Valencia Basket. El club, como en los últimos años, continúa con la filosofía de desarrollar a jugadores jóvenes y revalorizar a los no tan jóvenes, lo que les hace mejorar cada temporada. Adam Waczynski acapara las miradas de este año para volver a realizar una gran temporada antes de emprender, quizás, una aventura en la NBA el próximo verano. .

El último cuarto decidió un encuentro donde el GBC estuvo a remolqueLa pasada campaña los de casa lograron vencer en dicho encuentro, en la tercera jornada de la campaña, con un contundente 85-69 gracias a la aportación del banquillo con jugadores como el propio Waczynski, Nankivil o Chagoyen. A pesar de que los donostiarras sacaran el carácter que no han demostrado hasta ahora para luchar en todo momento en una pista donde sólo han ganado una vez, los de Moncho Fernández realizaron un excelso último cuarto donde disiparon todas las dudas y lograron una victoria importante que esperan repetir esta campaña.

Jaume Ponsarnau recalcó que dicho encuentro se trata de una prueba de fuego para su equipo ante un Obradoiro "que elabora los ataques conceptualmente muchísimo. En cualquier momento te puede sacar un tiro. Esto les lleva a atenazarse muy bien en los partidos. Es una gran prueba para nosotros. Muchos días en momentos determinados de partidos nos hemos hecho muy pequeños y sabemos que tenemos la gran prueba allí. Sin ninguna duda ahí está el reto".

Por otro lado, Moncho Fernández destacó la "particular" forma de jugar del RETAbet Gipuzkoa Basket con sistemas "elaborados y trabajados, buscando las ventajas en cada momento". El técnico local reconoció que los guipuzcoanos les obligarán "a defender mucho tiempo la posesión, porque es un equipo que cuida mucho el pase y madura mucho las acciones. Tendremos que tener paciencia para intentar frenarlos”.

Cuatro encuentros y cuatro derrotas son los datos que acumulan los donostiarras. Las victorias deben llegar ya para un equipo que ha renovado sus retos pero que todavía no encuentra la ilusión que había generado en verano. El Río Natura Monbus quiere seguir fuerte en casa ante un rival que históriciamente se le ha dado bien, aunque siempre hayan sido encuentros disputados en el Fontes Do Sar. El GBC tiene una prueba de fuego para comenzar, de verdad, la temporada, competir, lograr victorias y tirar hacia arriba.