El Herbalife Gran Canaria de Aíto García Reneses está dando mucho de que hablar en este inicio de la temporada baloncestística. Tras haber jugado doce partidos: seis en cada competición en la que participa (Liga Endesa y Eurocup), se ha posicionado como uno de los equipos más rocosos para los rivales. Atacar es siempre muy complicado para los rivales del 'Granca'. Y es que, solo el Alba Berlin, en la cuarta jornada de la Eurocup, ha conseguido anotarle más de 80 puntos en un partido: toda una proeza. 

Esto ha elevado a la defensa del Gran Canaria a un nivel superior, casi perfecto, el cual es temido por todo rival que se enfrente a los claretianos, tanto fuera de casa como en el feudo amarillo de la capital grancanaria. De entre los 36 equipos de todo el continente que participan en la primera ronda de la Eurocup, el conjunto isleño es el sexto que menos puntos encaja: 438 en seis partidos disputados, es decir, un total de 73 puntos por partido. Solo se encuentran por delante el Zenit de San Petersburgo, que ha encajado 437 puntos; el Aris, que ha recibido 436; el Unics Kazan, con 429 puntos; el Dominion Bilbao Basket, que ha recibido 427 puntos; y el Valencia Basket, que solo ha encajado 391 puntos en seis partidos. 

El Herbalife es el equipo que menos faltas comete en Eurocup

A estas grandes estadísticas se le suma el hecho de que el equipo entrenado por García Reneses es el que menos faltas comete de toda la competición: solo 110 faltas en los seis partidos disputados. Esto supone que, de media, el 'Granca' comete unas 18 faltas cada encuentro. Para que se hagan una idea aproximada, el equipo de la Eurocup que más "agresivo" es con sus rivales es el Alba Berlin, que con casi 27 faltas por partido, lidera la clasificación.

¿Afecta este hecho a la capacidad defensiva del equipo?

Sin embargo, hay quien dice que el ser excesivamente "blando" en las transiciones defensivas hace que un equipo sea más vulnerable a encajar puntos y canastas que, con mayor intensidad, podrían ser evitadas. El caso es que el Herbalife, a pesar de ser poco "violento", ostenta la cualidad de defender intensamente, evitando de todas maneras la canasta fácil. Es uno de los retos que se marcó Aíto al comienzo de la temporada como cambio con respecto al pasado curso. Además, es también uno de los sellos del veterano entrenador. 

Siempre quedará la duda de qué podría haber conseguido el Gran Canaria si hubiera cometido alguna que otra falta más en los partidos disputados pero, sin duda, lo logrado hasta la fecha tiene un gran mérito. Desde la defensa se pueden construir buenos ataques: una máxima del baloncesto que, ahora más que nunca, tiene mucho sentido en la entidad de la isla.